Fracaso. No hay otro apelativo. En Old Trafford, el Manchester United quedó eliminado de la Copa de la Liga a manos de un club de la segunda categoría, el Derby County, cayendo en definición a penales tras un agónico empate 2-2. Para peor, Alexis Sánchez quedó relegado por José Mourinho, teniendo que ver el partido desde la banca. Todo mal.
Las malas actuaciones dejaron en un segundo plano al tocopillano, quien atraviesa por su momento más bajo en el fútbol inglés. Ni siquiera en el Arsenal era blanco de tantas críticas, sea de la prensa como de los propios hinchas. Mourinho hizo rotación, dejando a Sánchez en el banco y no dispuso de su presencia en el desarrollo del juego, pese a lo complejo del compromiso.
El United comenzó bien, porque al tercer minuto de partido abrió la cuenta con un zurdazo cruzado del español Juan Mata. El Derby County, que dirige el exfutbolista Frank Lampard, salió con otra disposición en la segunda parte y sorprendió a todos remontando el 1-0 en contra. Un notable tiro libre de Harry Wilson igualó para la visita (59'). Los rojos se quedaron con 10 por la expulsión del arquero Sergio Romero, por tocar el balón con la mano fuera del área. El tercer golero, Lee Grant, ingresó por Mata.
A cinco del final, Marriott anota el 1-2 para la visita, cabeceando tras un rebote del veterano Grant. Cuando los nervios se propagaban en el Teatro de los Sueños, el salvador fue Marouane Fellaini, con un cabezazo en el quinto minuto de adición. Con el 2-2, la serie se definía en los penales. Llegaron a estar igualados 7-7, porque nadie fallaba. El Derby County quedó 7-8 arriba y la responsabilidad recayó en Phil Jones, quien falló su remate.
Un golpe duro para el United y sobre todo para Mourinho, quien queda en una compleja posición.