Didier Deschamps enfrentó a los medios en la última conferencia de prensa antes de la final de este domingo frente a Argentina. El DT de Francia habló de los temas, partiendo por la situación de Karim Benzema, quien ya está recuperado del desgarro que sufrió e incluso disputó hace unos días un partido amistoso con el Real Madrid. Y si quisiera, el entrenador podría sumarlo. Sin embargo, su respuesta fue tajante.
“¿Se pasa la voz entre periodistas extranjeros para preguntar por él? Si no contesto, dirás que estoy enfadado. Tengo jugadores que se lesionaron antes. Karim es uno de ellos. El último en lesionarse fue Lucas Hernández. Desde entonces, tengo 24 jugadores que gestionar. Plantear la pregunta sobre estos jugadores es, cuando menos, un poco torpe. El grupo está aquí. No me preocupan las invitaciones de jugadores, ex jugadores o jugadores lesionados ni me ocupo yo. Teníamos un grupo al principio y por lo que pasó... Perdimos a tres de ellos, con Nkunku al principio. Fueron parte del comienzo de la aventura. Mañana seremos 24″, señaló.
Otro problema es el virus que está afectando a buena parte del plantel francés. En ese contexto, el estratega no ocultó su preocupación. “Los jugadores estaban durmiendo cuando me fui, así que no tengo la información más reciente. Intentamos arreglárnoslas lo mejor que podemos, de forma tranquila. Hoy habrá datos. Los tendré esta noche y hasta mañana para asegurarme de que estamos listos para este gran partido. Es un tema que les interesa, lo comprendo. Intentamos tomar todas las precauciones posibles, adaptarnos y hacerle frente, sin pasarnos. Esta es obviamente una situación... Si no existiera sería mejor, pero nos las arreglamos como podemos”.
Por otra parte, el seleccionador galo se refirió al ambiente que encontrará en la definición. “Este equipo argentino cuenta con un apoyo popular muy fuerte. Esto es así en todas las competiciones. En el estadio mañana, aunque habrá aficionados franceses, la mayoría serán de Argentina. Espero un ambiente festivo. El pueblo argentino es apasionado. Apoyan plenamente a su equipo. Hay un ambiente festivo, se canta mucho. Es bueno que haya tanto ambiente para un partido como este. Es una final. Después, nuestros adversarios no están en las gradas, sino en el campo. Uno de los dos equipos tendrá una tercera estrella en su camiseta tras el partido de mañana”, sentenció. Y sorprendió agregando: “Sé que incluso algunos franceses quieren que gane Messi, pero vamos a esforzarnos para ganarla nosotros”.
Asimismo, Deschamps evitó comparar a la Albiceleste con el equipo del Mundial anterior al que vencieron 4-3 en la ronda de los 16 mejores. “Siete jugadores de 2018 siguen aquí. Realmente no es el mismo equipo. No voy a comparar, no tiene sentido. Aquello fue en octavos de final. Pero los seis partidos jugados, con diferentes jugadores, diferentes sistemas, eso es útil. Tenemos tres observadores que han visto todos sus partidos. Esto nos permite disponer de información precisa. Argentina puede hacer algo diferente mañana, pero nosotros también. Marruecos, en semifinales, empezó con una defensa de cinco. No lo habían hecho antes. Hay que estar preparado para cualquier situación”, argumentó.
Finalmente, se refirió a Kylian Mbappé, su gran figura. “Cuando tiene que hablar, habla. Ha hablado a veces. Kylian necesita paz, serenidad. Está centrado en el campo, en lo que tiene que hacer en el campo. Se encuentra en un excelente estado de ánimo. No deseo perturbar su tranquilidad, su estado de ánimo...”, cerró.