El día en que René Houseman le hizo un gol a River Plate jugando borracho

René Houseman, campeón del mundo con Argentina en 1978 y con un paso por Colo Colo, falleció hoy a los 64 años y las anécdotas del talentoso ex jugador comenzaron a aparecer. Por ejemplo, el día en que el Loco le marcó un gol a River Plate en la 27ª fecha del Torneo Metropolitano de 1975, cuando defendía a Huracán, luego de una noche de celebración y alcohol que se prolongó a horas antes del partido.

Según cuenta la historia, Houseman había pedido permiso para celebrar el primer cumpleaños de su hijo Diego, por lo que lo autorizaron a integrarse más tarde a la concentración de su equipo, que se aprontaba, al día siguiente, a jugar contra los millonarios. El acuerdo entre el club y el futbolista era que un dirigente lo pasaría a buscar al festejo, pero cuando fueron a su encuentro, pidió extenderlo. Lo mismo se repitió en la nueva hora pactada, pero el jugador se devolvió a buscar sus llaves, como excusa, para llegar al otro día a reunirse con el plantel.

"¡Cómo no me voy a acordar! Es como si fuera hoy. Era el cumpleaños de mi hijo. Festejé hasta las 10 de la noche, hora en que me vinieron a buscar para ir a concentrarme. Pero como era muy temprano, les dije 'dejenmé hasta la una', y me dejaron. Y a la una en punto me vinieron a buscar de nuevo. Me fui, pero acusé que había dejado las llaves del auto en la casa. Así que les dije que se quedaran tranquilos, que yo ya volvía a la concentración… Pero volví, sí, a las 11 de la mañana, totalmente en pedo. Si hasta casi me meaba encima", dijo años después a El Gráfico de Argentina.

Lo cierto es que Houseman se juntó con sus compañeros horas antes del partido y chocó su auto en el portón de la entrada a la concentración. En su habitación, lo metieron a ducharse, varias veces, con agua helada, y le dieron tazas de café para despertarlo. Lo único claro que tenía el jugador, dentro de lo borrosa que fue su jornada, es que el partido no se lo iba a perder, misma opinión de los demás miembros del plantel, que querían al Loco en cancha.

"Fue el único partido que jugué de este modo, después nunca más, y como consejo no le recomiendo a nadie jugar en esas condiciones", reconoció Houseman.

Al momento de dar las formaciones, el ex Colo Colo fue presentado de titular y con la siete en la espalda. El aliento, cuenta, no se lo descubrieron rivales ni el árbitro, de quien pasaba lejos para que no lo notara. Houseman tuvo su mejor momento al minuto 41 del segundo tiempo, cuando recibió un pase de Russo, encaró, pasó entre dos defensores, se puso frente al arquero, el posterior campeón del mundo Ubaldo Fillol, lo eludió y definió de zurda, poniendo el 1-0 para Huracán. El resultado final fue 1-2, pero el partido pasaría a la historia por ser el día en que el fallecido jugador le marcó un gol a River Plate estando borracho.

"Los dirigentes no querían que jugara, pero yo les dije: 'Esperen que me duermo una siesta y después vemos'. Me dormí dos horitas, salí a la cancha, metí el gol, pedí el cambio y me fui a dormir. No daba más. Perdimos 2-1", concluyó el ex jugador.

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