Una polémica situación se produjo en el partido entre las selecciones juveniles de Chile y Venezuela, que terminó en victoria de 1-2 para la Vinotinto. De acuerdo con las imágenes de la transmisión oficial del encuentro, en minuto 70  se produjo un entredicho entre el zaguero nacional Nicolás Díaz y el lateral Pablo Bonilla.

El Canal del Fútbol aseguró, un par de horas después del partido, que la Federación Venezolana de Fútbol estudiaba la presentación de una denuncia ante la Conmebol en contra de Díaz. "La imagen es clara" afirman desde la delegación vinotinto. "Muerto de hambre" es el insulto que le habría proferido el defensor de Palestino a su par del Portuguesa.

A poco de difundirse esta información, el propio Díaz, a través de su cuenta de Instagram, reconoció su error y ofreció disculpas públicas al equipo llanero:

Pero más tarde, el jugador (en la imagen, encarado por Riki Mangana), a través de una carta pública que fue difundida a través del sitio web de la ANFP se extendió algo más sobre la situación, con una redacción bastante más cuidada. El texto dice así:

"Estimados Sres Rafael Dudamel, Pablo Bonilla y miembros de la delegación de la Selección Venezolana Sub 20:

Por medio de la presente, quisiera hacerles llegar mis más sinceras disculpas por mi reprochable actitud hacia Pablo Bonilla y el pueblo venezolano durante el desarrollo del partido entre Chile y Venezuela por el Sudamericano Sub 20.

Soy consciente de la larga historia de amistad entre Venezuela y Chile. Durante muchos años, miles de chilenos emigraron y fueron recibidos de manera cariñosa y fraterna. Todas las referencias que tengo de compatriotas que vivieron allá son tremendamente positivas y dan cuenta de un hermoso país, al que nunca pretendí lastimar con mis dichos.

Lamento profundamente mi reacción hacia Pablo Bonilla. En ningún caso, mi intención fue la de denigrar o insultar al pueblo venezolano. Al igual que millones de chilenos, he tenido la suerte de compartir con personas que han llegado de Venezuela a Chile y me he dado cuenta de su calidad humana. 

Sin duda, esta triste experiencia me servirá en mi carrera como deportista. Los jugadores de fútbol tenemos una enorme responsabilidad pública. Son millones de personas las que ven en esta actividad el reflejo de valores como el compañerismo, el respeto y, por sobre todas las cosas, el juego limpio. 

"Las cosas que pasan en la cancha, se quedan en la cancha" es un dicho que se utiliza de forma habitual en esta actividad, pero no justifica actitudes irresponsables y dichos tan hirientes como el que cometí. Soy un convencido de que el fútbol es mucho más que esto. Mi comportamiento como deportista profesional y persona pública tiene que ser siempre mucho más que esto.

Pido las más sinceras disculpas a Pablo Bonilla, al Profesor Rafael Dudamel y todo su equipo de trabajo, a la Federación Venezolana de Fútbol, al pueblo venezolano, a toda la comunidad venezolana que vive en Chile y, por supuesto, a todo aquel que se sintió ofendido por mis dichos. 

En la próxima jornada en que nos veamos en el Estadio El Teniente, espero poder entregarles mis más sinceras disculpas personalmente. 

Nicolás Díaz Huincales

Jugador de la Selección Chilena Sub 20".