Reinaldo Sánchez aún se recupera de las lesiones que sufrió en el marco del asalto a las oficinas de Viña Bus, ubicadas en el sector Reñaca Alto, de la Ciudad Jardín. El presidente de Santiago Wanderers, y ex timonel del fútbol chileno, sacó la peor parte. Fue golpeado con la parte posterior de un arma de fuego, lo que obligó a aplicarle diez puntos de sutura.

Además, lamenta un perjuicio económico que solo en dinero alcanza los $ 3 millones, dinero que estaba destinado al pago de sueldos de los trabajadores de Viña Bus. A esa cifra hay que sumar otras pérdidas, como la de su teléfono móvil.

El relato

El directivo sufrió angustiosos momentos. A eso de las 16.30 horas de este jueves, dos antisociales armados ingresaron en la dependencia detrás del botín. Ese fue, apenas, el inicio de una auténtica pesadilla que, por cierto, no es inédita para Sánchez y sus dependientes.

Andrés Sánchez, hijo del dirigente, también vinculado a la dirigencia del equipo caturro, da cuenta de la inquietud familiar. “Estamos súper afectados. Este es el sexto robo que sufrimos en un año y medio, todos con violencia, pero esta vez le tocó a mi papá”, lamenta.

Reinaldo Sánchez, presidente de Santiago Wanderers.

Luego se adentra en la descripción de un momento en que la vida de su padre estuvo en serio riesgo. “Dispararon cuatro veces dentro del taller y lo golpearon fuerte en la cabeza”, relata. “Afortunadamente, ya se encuentra en casa y con reposo”, sostiene, a modo de corolario de una situación que pudo tener consecuencias trágicas.

Inseguridad

Sánchez clama por el aumento de las medidas de seguridad. “Las pérdidas materiales son lo de menos, pero el tema de fondo acá es que la delincuencia se encuentra desatada, sobre todo en nuestro rubro. Sin ir más lejos, la semana pasada tuvimos una pelea a cuchillos entre pasajeros arriba de uno de nuestros buses y las autoridades brillan por su ausencia en términos de seguridad pública”, reclama.

El emplazamiento es directo. “Son ellos quienes deberían hacerse cargo del miedo e inseguridad que se vive en las calles, donde el comercio está cerrando, como mucho, a las 19 horas y ya nadie quiere volver tarde a casa por miedo a lo que pueda suceder”, insiste.

Una hora después del ilícito, luego de la respectiva denuncia, Carabineros encontró el automóvil en que se desplazaron los delincuentes. El automóvil tenía encargo por robo, pues había sido sustraído en Concón. La policía uniformada está realizando las indagatorias respectivas para dar con los responsables de los delitos cometidos en contra de Sánchez y de sus empleados.

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