Rafael Nadal terminó coronándose como campeón de la última edición de Roland Garros tras dejar en el camino, entre otros, a Novak Djokovic. Un triunfo que se celebra el doble o más considerando el síndrome de Müller-Weiss que afecta el pie izquierdo del manacorí, una enfermedad degenerativa que afecta al deportista desde el 2005.
Por lo mismo, el doctor de Nadal, Ángel Ruiz-Cotorro, valora aún más lo logrado por el tenista que 48 horas después de la final apareció en muletas en medio de los tratamientos para recuperar el pie de cara a los próximos torneos.
“Rafa está siguiendo el proceso y evolucionando bien. Vamos a ver en las próximas horas y en dos o tres días veremos qué efectos ha tenido. En cuatro días le pondremos en pista y ahí iremos viendo cómo va evolucionando el tratamiento. Hemos activado esos nervios de la zona y veremos la posibilidad de que sea lo más llevadera posible. Si queda alguna molestia tras el tratamiento veremos si puede o no competir en Wimbledon”, explicó el médico en el programa El Partidazo de COPE.
Además, valoró de gran forma el título de Roland Garros a pesar de la lesión. “Lo que ha hecho Nadal es un milagro. No es solo que te duerman el pie, sino aceptar el reto y, a la vez, aislarse de toda esa sensación. Estas cosas solo las puede hacer Rafa”.
A su vez, Ruiz-Cotorro señaló que el periodo de paro de la actividad a causa de la pandemia del Covid fue negativo. “Es una lesión muy rara en un deportista y hay muy pocos casos en la bibliografía mundial y no hay ningún caso al nivel de Rafa. Nos la encontramos en 2004-2005 y hemos ido cumpliendo etapas. Es una lesión que se va degenerando con el tiempo y hemos ido buscando recursos a cada situación. La cosa cada vez se complica más y con la pandemia más porque este tipo de lesiones no van bien con el reposo, sino que se van adaptando poco a poco a las cargas. Cuando volvió tras la pandemia hubo un cambio brusco. Y ahora, tras lo de la costilla, le pasó un poco lo mismo: cinco semanas sin apoyar el pie, después comenzar las prácticas más rápido de lo que corresponde y llegamos justos a París”.
También se refirió a la forma en la que llevaron la lesión de Nadal mientras competía y ganaba torneos. “En medicina hay que ser muy discreto. Nosotros tenemos una función que es ayudar y hay que tener respeto sobre el paciente. La lesión de Rafa está escrita en los libros, pero la situación del momento, como está la articulación, como están las otras articulaciones, es una cosa de conocerlo día a día y conocer todo ese proceso”.
Por último, lanzó un mensaje de optimismo: “Cuando los tratamientos se utilizan es porque confías en ellos. Es un caso único. Estamos hablando de alguien que tiene que intentar jugar Wimbledon y vamos a ser optimistas. Rafa ha estado jugando con dolor todos estos años. Cuando la gente hablaba de la rodilla o de problemas que tenía, todos venían derivados de aquí. La base de todo el problema era el pie y todo se ha ido aguantando, superando las situaciones. Y Si a Rafa le damos un poquito, con ese poquito se maneja bien”, concluyó el doctor.