El domador de la San Silvestre

Carlos Díaz , el atleta que entregó dos oros en la expedición chilena en los Juegos Bolivarianos de Santa Marta, en los 1.500 y 5.000 metros, con sorprendentes 3'45"58 y 14'02"92, hace bastante tiempo que corre bien.

Su presentación en Colombia sólo vino a reafirmar lo que lleva haciendo desde hace tiempo, y que esta temporada se inició con un impresionante cuarto lugar en la mítica carrera de San Silvestre, en Vallecas, Madrid. Quizás por no subirse al podio, quizás por su silencio y pasiva personalidad, curiosamente, pocos repararon en el éxito del fondista chileno en España, donde demostró estar al tope de la élite en los 10.000 metros.

En Madrid, donde tiene su base de trabajo durante buena parte del año, el atleta se foguea con los mejores del fondo europeo.

Julia del Río, su madre y entrenadora, lo guió como siempre en la prueba. Junto a su equipo, le ordenó que fuese desde el primer metro junto al pelotón de avanzada, pues su nivel estaba a tope. "Hice caso de todos los que estaban a mi lado. Me decían: 'Carlos, tú tienes que salir al ritmo de los mejores'. Y lo hice. Pasamos el kilómetro 5 en 13'58" y aún así yo veía que iba cómodo. Me pareció impresionante", recuerda.

Díaz ya está confirmado para correr una vez más la carrera vallecana, donde, ahora sí, confía cazar un podio. "Espero que así sea. Seria histórico poder conseguir una medalla", señala.

La ausencia de elogios por su mérito no le comió la cabeza. "Que la gente me felicite no cambia mi vida", asegura. Un héroe no necesita de saludos. Por ahora, Díaz sigue corriendo.