Olympique de Marsella no suma puntos en sus dos primeros partidos por la Champions League. Tras caer como local ante Eintracht Frankfurt, el técnico del cuadro portuario Igor Tudor lamentó la actitud con la que entró su equipo al Velodrome.
“Entramos demasiado lento en el partido, como si estuviéramos impresionados por este partido de Champions en casa. Fuimos demasiado lentos en la construcción y no marcamos la diferencia desde el principio”, explicó el entrenador del cuadro de la Costa Azul.
Asimismo, reconoció que “en el segundo tiempo empujamos y merecimos un gol, pero no llegó. Al final perdemos ante un equipo fuerte. Era el tercer partido en seis días, hay cansancio evidente y muchas lesiones”.
Consultado sobre la salida de jugadores como Alexis Sánchez y Dimitri Payet, el DT justificó la decisión por el nuevo aire que le dieron al equipo los futbolistas que entraron.
“Hice los cambios porque necesitaba algo diferente y los que entraron nos dieron mucho más”, aseveró el ex técnico de Udinese y Hellas Verona.
Derrota dolorosa
De la misma manera, el adiestrador balcánico insistió en que su equipo mereció una mejor suerte frente al ordenado cuadro germano.
“Ellos no nos dominaron tanto, el primer período fue bastante equilibrado, aunque es cierto que no creamos mucho en la delantera. En el segundo, realmente empujamos”, dijo el DT de Marsella.
En la misma línea, el croata explicó que “perdimos, pero lo dimos todo. En cuanto al juego, no fue nuestro mejor partido. El tercer partido del torneo lo jugaremos sin especulaciones, preparándonos como solemos hacer”.
En lo inmediato, el cuadro más popular de Francia deberá recibir el domingo al Rennes, en el encuentro válido por la octava fecha de la Ligue 1. Un duelo donde deberá recomponer el bloque posterior.
“Terminamos con un solo defensor y jugadores que fallan pases que normalmente no fallan. Veremos para el domingo qué defensa podremos alinear. Tenemos muchos problemas en este sector”, finalizó Tudor.