Universidad de Chile estaba siendo acusado de no cumplir los protocolos sanitarios. Rafael Dudamel, el entrenador de la U, salió ayer al paso, para reconocer un polémico episodio. “En vista de los comentarios que comenzaron ayer, que hablan de una reunión social que se realizó en mi residencia, he querido aclarar que hemos sido muy respetuosos de lo protocolos que nos han marcado en el club y en nuestra vida personal”, aseguró el técnico venezolano en conferencia de prensa.
Sin embargo, el adiestrador reconoció que existió una cita con sus jugadores en su casa. Pero la justificó diciendo que era una reunión de trabajo. “Muchas veces queremos compartir y complementar información sobre el juego y desde esa idea, si es cierto que entraron y salieron algunos jugadores de mi residencia. En donde yo les esperaba con mi cuerpo técnico, tres o cuatro de ellos, para poder compartir alguna información”, confesó.
Pero a sus vecinos no les cayó nada bien que varios autos se estacionaran frente a la casa del estratega y, tal como lo dictan las normas, en cuarentena total están prohibidas todo tipo de reuniones, excepto funerales, acudieron a carabineros para denunciar el hecho. “Llamaron a las autoridades y llegaron mi residencia. Los atendí por dos o tres minutos y puedo decir que fue una conversación amena. Tomaron mi nombre y les hice saber que estábamos en reunión de trabajo. Ellos lo entendieron y pude regresar a la actividad de la ANFP para fortalecer los protocolos para evitar el Covid”, agregó.
Acto seguido, Dudamel le pidió disculpas a sus vecinos y aclaró: “Nunca estuvimos todos juntos. No hubo ni 15 ni 20 personas, pero no quiero que sea una excusa para que ese tipo de planificación siga ocurriendo. Tomaremos los recaudos necesarios, para que no vuelva a suceder”.
Sin embargo, el desacato a las normas que rigen al país en pandemia puede traer duras sanciones al técnico, pero más aún al club que pertenece. Sobre todo, después de que -a inicios de esta semana- el propio ministro de Salud, Enrique Paris, se “mostró preocupado por el fútbol”.
De hecho, el Gobierno reaccionó de inmediato pues la ministra de Deportes, Cecilia Pérez, condenó lo sucedido en sus redes sociales. “Los permisos entregados al fútbol son para la práctica deportiva, no para reuniones en domicilios. Rechazamos lo realizado por el DT de Universidad de Chile. Llamamos a respetar las medidas del ministerio de Salud y a colaborar con el contexto: todos debemos ser un ejemplo para la ciudadanía”, concluyó.