Vicente Pizarro asomó como el jugador de mayor proyección de la temporada en Colo Colo y, por lo mismo, la lesión que sufrió en el amistoso frente a River Plate fue un verdadero balde de agua fría para su club, ya que se confirmó durante esta tarde que sufrió la rotura del ligamento cruzado posterior de la rodilla derecha tras una barrida de Pablo Solari.
Este jueves el volante había relatado sus sensaciones tras la jugada. “Amanecí con dolor, ayer tuve dolor al principio del golpe. Ahora va a evaluar el doctor, ojalá no sea nada más que un golpe. Durante la tarde lo verán bien y conversaremos qué es lo mejor”, comentaba.
Y agregó: “Sentí un golpe, pero fue distinto porque se me puso un poco tensa la rodilla, pero descansé bien, dormí un poco incómodo pero pude descansar. El doctor lo verá bien y evaluaremos qué es lo mejor”.
A pesar del optimismo, el volante lo obligará a parar. “El jugador será sometido a tratamiento ortopédico y kinésico para su rehabilitación”, informó el club a través de un comunicado, en el que no se precisan los tiempos de recuperación. Eso sí, al ser una rotura parcial, la vuelta a las canchas sería notoriamente más rápida que si hubiese sido total.
Por lo pronto, el volante no estará en los duelos frente al Betis, el 16 y 19 de noviembre.
El hijo de Jaime Pizarro se había mostrado esperanzado incluso de poder estar en esos encuentros. “Uno se fija más que nada en la calidad del rival. Nos servirá a todos para el roce internacional, porque creo que estos rivales dan una exigencia mayor para terminar la temporada y para pensar el próximo año”, había manifestado antes de realizarse los estudios.
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