Duro golpe para la ANFP: el fútbol chileno pierde el arbitraje contra Warner y tendrá que pagar US$ 37 millones

Un duro y millonario golpe recibió la ANFP durante esta jornada. Según pudo saber El Deportivo, Warner ganó el arbitraje que había iniciado contra Quilín en diciembre de 2021, esto a causa de los partidos que no se disputaron entre 2019 y 2020. La resolución dictaminó que el ente rector del fútbol chileno deberá pagarle 37 millones de dólares a la cadena televisiva estadounidense.

Turner International Latin America (TILA), propietaria del CDF, actual TNT Sports, reclamó que no recibieron el producto licitado, en relación a la cantidad de encuentros que se debieron disputar por temporada. Se acusó a la entidad presidida por Pablo Milad de no cumplir con los compromisos mínimos de programación estipulados en el contrato de licencia -firmado el 20 de diciembre de 2018- y que establecen un torneo con 16 equipos como mínimo y 30 semanas de partidos, durante al menos 10 meses.

El detalle indica que en 2019 el Campeonato Nacional se terminó abruptamente en octubre de ese año y no se continuó disputando producto del estallido social. Como si fuera poco, la situación fue aún peor al año siguiente. El Covid.19 y la pandemia provocaron que el torneo estuviera suspendido desde marzo hasta finales de agosto, específicamente hasta el 29 de ese mes, día en que el fútbol volvió con el partido entre Colo Colo y Santiago Wanderers en el Monumental (triunfo por 2-3 para los de Valparaíso).

Esta era la última instancia de juicio entre ambas partes, por lo que los 37 millones de dólares que deberá cancelar la ANFP serán difíciles de apelar, aunque no descartan recurrir a la Corte Suprema. Algo que genera preocupación en Quilín por las consecuencias económicas que esto pueda generar. No obstante, se debe negociar con la entidad que preside Pablo Milad para acordar la forma de pago. No

Además, cabe destacar que todavía restan nueve años de contrato entre la empresa norteamericana y la ANFP.

En 2021, Turner (hoy Warner) calculó que las fechas canceladas de los torneos nacionales del 2019 le causaron menoscabos por 10.322 millones de pesos. Mientras que los mencionados casi seis meses sin fútbol de 2020 le provocaron daños por $ 34.428 millones.

Por su parte, desde Quilín acusaban ante el arbitraje la no transmisión de un partido por televisión abierta en cada fecha; la no transmisión de todos los partidos de la Primera B; falta de promoción y publicidad para los clubes y retraso en el pago de las cuotas mensuales. Por ello, exigía una indemnización de $ 28.100 millones, algo que finalmente no ocurrió.