Byron Castillo no irá al Mundial. Quedó claro en la nómina de Ecuador, que se conoció en la jornada de ayer. La escuadra que dirige Gustavo Alfaro sí lo hará, pese a que el fallo del TAS en la controversia que enfrentaba a la federación local con las de Chile y Perú, por la elegibilidad del actual defensor del León, de México, solo les favorece en cuanto a esa materia. La sentencia los exponía a nuevas sanciones si el carrilero seguía siendo convocado. En la mitad del mundo optaron no correr más riesgos.
La Federación Ecuatoriana de Fútbol no esconde su decepción. “Ante un fallo arbitrario del TAS, que desconoce los más elementales principios jurídicos universalmente aceptados, y ante el riesgo de sufrir nuevamente injustas sanciones, la Federación Ecuatoriana de Fútbol se ve en la obligación de no incluir al jugador Byron Castillo Segura en la lista final que ha sido presentada a la FIFA”, explica en el primer punto de un comunicado oficial en el que manifiesta su postura.
“Todos los hechos relacionados con el caso fueron conocidos por los jueces ecuatorianos, quienes en cuatro oportunidades le dieron la razón al jugador siendo ellas las únicas autoridades competentes en nuestro país para dirimir esta controversia. Cada uno de los actos de la FEF se ha realizado respetando precisamente lo que nuestro sistema jurídico dispone, obedeciendo las decisiones de las autoridades judiciales y administrativas, las que como federación estamos obligados a acatar, más cuando están en juego derechos fundamentales del jugador”, profundiza, en relación a una materia que usó como bandera durante los procesos en la FIFA y en el principal tribunal deportivo a nivel mundial. En ente rector del fútbol, de hecho, les concedió razón en sus dos dictámenes.
Fallo incomprensible
En el mismo sentido, añade: “Incomprensiblemente, el mismo fallo del TAS -que reconoce la elegibilidad del jugador- siembra ilegítimamente la duda respecto del contenido de su pasaporte que podría poner en riesgo no solo el avance de la selección en este mundial, sino comprometer su participación en la siguiente edición, en virtud de las sanciones que, sin fundamento jurídico alguno, han sido impuestas a la FEF”.
El último punto es igualmente enérgico. “Aunque hoy nuestra atención está puesta en el Mundial de Qatar, nuestro compromiso es agotar todos los recursos que el derecho nos conceda para demostrar nuestro correcto proceder y para reparar esta injusta y dolorosa situación, sea cual sea el foro en el que debamos hacerlo”, puntualiza.