Eduardo Vargas todavía no tiene claridad de donde jugará en la próxima temporada. El atacante anotó en la final de la Copa Libertadores para el Atlético Mineiro, pero también erró dos chances claras. “Teniendo un día duro hoy. No es fácil ver nuestro sueño pasar ante nuestros ojos. A menudo es difícil entender la voluntad de Dios, pero Él sabe todas las cosas, y seguiré temiendo a Él. Desafortunadamente, no conseguimos la victoria, pero por favor sepan que di todo de mí y lo dejé todo en ese campo. Buscamos, corrimos, luchamos y desafortunadamente nos faltó suerte”, manifestó el ariete luego de la definición ante Botafogo.
“Me gustaría llevar este mensaje para dejar mi agradecimiento al Atlético Mineiro por estos años aquí”, añadió. Esta última parte es elocuente al tener un ánimo de despedida con el elenco galo. “A los que siempre me han apoyado les agradezco mucho. Y a los que me criticaron mucho y siempre me pusieron como el villano, ustedes me hicieron más fuerte y me ayudaron a encontrar a Dios”, concluyó.
Ese día la prensa brasileña no evaluó mal al chileno, pero no olvidaron sus yerros. “Le dio al Atlético un cariz diferente en la segunda parte. Molestó la defensa del Botafogo, marcó un gol y fue el mejor de Galo en el campo. Tuvo una oportunidad clara al final, pero la desperdició”, manifestaron en Globoesporte.
Ahora evalúa su futuro. En diálogo con el medio AS, el delantero manifestó que no conoce su próximo destino. “Aún no lo sé, todavía es muy pronto”, reveló. En esa línea, el ariete no descartó la opción de retornar a Universidad de Chile. “No hay nada cerrado en estos momentos”, agregó.
En Azul Azul, eso sí, dan otros pasos. Su principal objetivo ahora es Octavio Rivero. Según información de El Deportivo, el delantero ya le dio a conocer a la directiva de su actual club, el Barcelona de Ecuador, que desea volver a Chile y sus motivaciones son dos: con la U podrá disputar la fase de grupos de la Copa Libertadores.