Efecto Miranda: la U está a seis puntos del descenso por primera vez en 133 días

Universidad de Chile toma aire. El fantasma de la B comienza a alejarse del Centro Deportivo Azul. Por lo menos algunas cuadras. El año azul ha sido malo. Los últimos triunfos no maquillan la gestión negativa que tiene a los laicos peleando el descenso nuevamente. Sin embargo, le dan confianza a un plantel que, hasta hace algunas semanas, parecía estar sumido en un pozo cuyo fondo no aparecía.

Ahora, tras la victoria de la U sobre Deportes La Serena el domingo, los estudiantiles están a seis puntos de Deportes Antofagasta, penúltimos en la clasificación. Vale consignar, de todas maneras, que los pumas tienen un partido menos. Aun así, los laicos mantendrán esa distancia, por lo menos, hasta el próximo sábado, cuando el elenco nortino se ponga al día, recibiendo a Palestino en el Calvo y Bascuñán.

La diferencia que mantienen los dirigidos por Sebastián Miranda sobre el cuadro que está en posición de descenso no se daba desde la decimoctava jornada. En aquella fecha, correspondiente al debut de Diego López en la banca laica por torneo nacional —ya había dirigido en la Copa Chile— vencieron a Unión La Calera y le sacaron seis positivos de ventaja. En ese momento, el cuadro cementero estaba penúltimo. De ahí el rendimiento de la U al mando del charrúa fue a la baja y la distancia con los colistas osciló entre uno y cinco puntos.

*Antofagasta ahora tiene un partido menos.

Al parecer la solución estaba en casa. Cuando Sebastián Miranda asumió su primer interinato, tras la salida de Santiago Escobar, logró completar un 50 por ciento de productividad, con dos derrotas y dos triunfos. Sin embargo, la directiva de Azul Azul optó por llevar a Diego López al CDA.

La primera tarea para el uruguayo era dejar atrás el mal recuerdo del periodo Roggiero-Escobar y superar el 50% de rendimiento, algo que en la U no ocurre desde Frank Kudelka. Pero el charrúa estuvo lejos. Bastante lejos, de hecho. A inicios de septiembre, se confirmó su salida del club universitario, con el pobrísimo número de 22,2 por ciento de los puntos obtenidos.

En ese contexto arremete el ex volante de Unión Española por segunda vez en el año. Y los resultados no tardaron llegar. Más allá de que escapan a seis positivos del penúltimo puesto, futbolísticamente, se ve a una U mejorada. Que no brilla, pero, en conocimiento de sus limitaciones, se ordena bien en la cancha y hace daño de la manera que puede: con el talento de sus jóvenes.

El reflejo de la mutación en Universidad de Chile queda claro en el clásico universitario de la Copa Chile. El duelo de ida, no el polémico encuentro suspendido en Valparaíso. En Santa Laura, los de Miranda superaron a los cruzados y no los vencieron por más de un gol debido a que Matías Dituro lo evitó. Un panorama absolutamente contrario al vivido en agosto en el Estadio Nacional, cuando los de Holan se hicieron un festín con el alicaído elenco de López y lo arrollaron frente a su a público.

En cuatro partidos, contando ambas competiciones, el estratega acumula tres victorias y una caída. Incluso ante Audax Italiano, derrota por 3-2 en Santa Laura, se percibió distinto a los tropiezos anteriores, cuando el equipo no encontraba la forma de hacer daño. Además, ha recuperado futbolistas. Cristian Palacios, que en el proceso de López no marcó ninguna diana, ya suma tres.

Los jugadores de la U saben que la salvación aún no se concreta. Sin embargo, el ambiente tenso que existía en La Cisterna durante los últimos meses parece quedar atrás. Se nota, también, a la hora de declarar. Yonathan Andía así lo dio a entender, en la entrevista con la transmisión televisiva, una vez consumado el encuentro contra Deportes La Serena. “El trabajo en la semana paga. Las jugadas las planificamos bien con el profe Miranda. Damos un respiro, pero seguiremos trabajando para dejar a la U en primera”, declaró.