D. Martínez: el meta estuvo mal ubicado para el 1-1 de Brereton. A pesar de ello, respondió cuando lo exigieron, como cuando evitó un golazo de distancia de Díaz.

N. Molina: el más bajo de la Albiceleste. Se notó frágil ante los avances de Brereton y cometió más de un error en las entregas.

Lis. Martínez: férreo y cumplidor compromiso del zaguero. Sin brillar, fue importante para darle progresividad a su escuadra.

N. Otamendi: comenzó apagado y sufrió con el gran arranque de Alexis, pero se repuso para entregarle solidez a los suyos.

N. Tagliafico: incomodó a Vargas, pero cumplió en su tarea de defender. Bastó con lo poco que mostró.

L. Paredes: bien ubicado, aunque sin resaltar. Fue un constante auxilio tanto para los zagueros como para la ofensiva de su selección. Fue amonestado por una falta sobre Alexis.

R. De Paul: gran trabajo silencioso del volante. Controló el mediocampo, con o sin balón, y se vio bien al momento de entregar. De su derecha salió el disparo que complicó a Bravo dejó el rebote servido y aprovechó Martínez. Se ganó la amarilla por una dura falta sobre Aránguiz.

A. Gómez: ni tan desequilibrante, pero cumplidor. No generó demasiado daño en terreno rival, no obstante, exhibió jerarquía cada vez que debió aguantar la pelota y distribuirla.

Á. Di María: no le pesó ocupar la jineta de capitán en desmedro de Lionel Messi. Demostró toda su categoría con el golazo que significó la apertura de la cuenta.

Lau. Martínez: un goleador de raza el argentino. No causó muchos dolores de cabeza cerca del área rival, sin embargo, estuvo bien ubicado para anotar el 1-2. Oficio puro.

N. González: opaco encuentro del delantero por la izquierda. Díaz no le dio muchas chances por su banda, pese a que, las pocas veces que entró en acción, generó algo de peligro.