Antes de los Juegos Olímpicos de París, Macarena Pérez dudaba de la continuidad de su carrera. Al menos, no se proyectaba para la siguiente cita. “Siendo súper sincera no veía Los Ángeles 2028 muy posible, pero después de París quedé con las ganas y motivación de seguir empujando. Ahora creo que es una de mis nuevas metas”, reveló a El Deportivo, poco después de quedarse con un histórico quinto lugar, que le dio su segundo diploma consecutivo tras su octavo puesto en Tokio, tres años antes.

Lo cierto es que la rider nacional este 2024 ha hecho historia para el país en el BMX Freestyle, pues semanas antes de la cita de los anillos se convirtió en la primera exponente chilena en participar en los míticos XGames. “Fue una experiencia que me sirvió para hacer algo diferente, andar de otra manera y conectar con más gente. Me fue súper bien y me ayudó a juntar energías para llegar a París”, sostuvo sobre esa inédita aparición.

Pero su llegada a ese célebre evento de deportes extremos va de la mano con una reivindicación femenina, pues, según propia confesión, en 2019 rechazó una invitación junto a otras competidoras hasta que no les dieran la categoría de competencia, por lo que gracias a esa presión, la organización cedió y este año fueron parte del certamen de manera oficial. “El hecho de que se haga la categoría es un gran triunfo y obviamente estoy emocionado por ser una de ellas”, expresó.

Por otro lado, lo realizado en la capital francesa también está relación con un proceso interno muy importante. “Antes había momentos en que me sentía muy bloqueada mentalmente, porque sabía hacer los trucos, pero de repente cuando estaba a punto de hacerlos en competencia me pasaban mil cosas en la cabeza, muchas cosas negativas que te impiden llegar al rendimiento más alto. He trabajado mucho con una psicóloga que me ha ayudado con esos bloqueos y lo que hice en París lo hice estando 100% segura. Me sentí súper bien, fue una rutina perfecta y me quedo muy feliz con lo que logré, porque fue más de lo que esperaba”, relataba tras su actuación.

Después de un breve descanso, Maca retomó las competencias y en la reciente Copa del Mundo de Shanghái, disputada el fin de semana pasado, la rider criolla remató en el octavo puesto, confirmando su condición de deportista de élite. Ello también tuvo una consecuencia directa en el ranking planetario, pues se transformó en la número uno del mundo, algo inédito para su carrera y otro gran paso adelante en su desarrollo.

Ahora marcha primera de la clasificación de la categoría Park, con 4.680 unidades. Segunda aparece la china Yawen Deng (4.570) y tercera la estadounidense Hannah Roberts (4.100), grandes rivales de la deportista nacional durante el último tiempo. “A pesar de los altos y bajos, sigo empujando. No importa la lucha, sigue apareciendo”, escribió la deportista en su cuenta de Instagram.

En tanto, en la clasificación general de las Copas del Mundo de la temporada, es la mejor latina, ubicándose en el quinto lugar, con 1.470 puntos totales.

Los planes futuros

El nuevo estatus de Macarena Pérez en el BMX mundial alimenta su ilusión de seguir haciendo historia en la disciplina y motivando a nuevos exponentes: “Espero que sí, espero ser un buen ejemplo a seguir y motivar a más niñas y niños a que luchen por sus sueños”.

Su coach, Víctor Muñoz, está seguro de que todo esto ayudará a expandir este deporte. “Absolutamente, en Chile el BMX está en un crecimiento inmenso y con lo que está haciendo Macarena más aún. Y lo mejor es que muchas niñas quieren seguir sus pasos y se ve un potencial enorme al igual que en hombres”, vaticinó hace un tiempo.

De hecho, el entrenador no solo cree que su dirigida seguirá brillando, sino que se calzará una presea en Los Ángeles 2028. “¿Si es posible? ¡Claro que es posible! Tenemos cuatro años para prepararnos para ese evento. Después del desempeño de Macarena y los jóvenes varones que vienen con una buena preparación, podemos llegar a tener una medalla. Lo sueño, lo pienso y lo decreto”, aseguró.