El Arsenal está de vuelta en el campo de entrenamientos. El equipo londinense es el primero de la Premier League que retoma las prácticas grupales, aunque ese concepto es relativo, pues las estrictas medidas de seguridad que se están aplicando para evitar contagios de coronavirus limitan considerablemente las opciones de trabajo para el cuerpo técnico que encabeza Mikel Arteta.
Las limitaciones son varias. En principio, las rutinas se circunscriben a grupos de un máximo de cinco futbolistas, quienes en todo momento deben mantener la distancia social. El club determinó que el ingreso al Arsenal Training Centre, ubicado en London Colney, debe realizarse en solitario y que, además, los jugadores no tendrán acceso al resto de las instalaciones del club.
En Inglaterra están a la espera de que las autoridades permitan el retorno a las actividades físicas colectivas, una determinación que recién podía adoptarse en la segunda semana de mayo.