El gran partido de la sexta fecha de LaLiga era un clásico. En el Metropolitano, el Atlético de Madrid recibió a su poderoso vecino, el Real Madrid, y le ganó por 3-1, quitándole el invicto en el campeonato español.
Los merengues aspiraban a recuperar la punta de la tabla de posiciones, luego del triunfo del Barcelona sobre el Celta de Vigo, este sábado. El equipo blanco llegó al duelo como el único con 100% de rendimiento en la Primera División hispana (15 de 15). Carlo Ancelotti no pudo contar con el brasileño Vinícius Júnior, quien se cayó de la convocatoria luego de recuperarse de una lesión. Así, su compatriota Rodrygo arrancó como el único punta.
Los rojiblancos del Cholo Simeone tuvieron un inicio inmejorable, poniéndose en ventaja con prontitud. Apenas pasaron tres minutos de juego y Álvaro Morata convirtió el 1-0 mediante un cabezazo tras un centro de Samuel Lino. El ariete apareció por detrás de Alaba. El golero Kepa quedó parado. Una vez más en lo que va de la temporada, el Madrid comenzó perdiendo un encuentro.
Más tarde, en los 18′, el Atleti llegó al 2-0 a través de Antoine Griezmann, nuevamente con un cabezazo a un rincón. El francés impacta el balón ubicado entre el central izquierdo (Alaba) y el lateral zurdo (Fran García) para ampliar la diferencia.
La Casa Blanca lo pasaba mal en la cancha. No se encontraba. Pero el Madrid algo tiene que siempre termina despertando. Nunca hay que darlo por moribundo. Con el marcador en contra, los merengues mejoraron y le quitaron la pelota al local, que fueron retrocediendo. En los 35′, llegó el descuento de Toni Kroos, quien engancha y saca un tiro fuerte al primer palo de Jan Oblak. Se le complicó el panorama al Atlético antes del descanso.
Sin embargo, la parte complementaria comenzó tal como el primer lapso: con los colchoneros golpeando. La fórmula era la misma: centro y cabezazo. Nuevamente apareció Morata dentro del área para poner un testazo y comenzar a cimentrar la victoria. Como era de esperarse, el Real Madrid se fue con todo para buscar la remontada. Pero el Atlético aplicó un libreto que le sienta cómodo: encerrarse. La visita hizo cambios, entre ellos Joselu como centrodelantero, sin embargo la línea de cinco de Simeone estaba firme.
El triunfo rojiblanco se celebra mucho en Cataluña, porque la derrota del Real Madrid permite que los punteros de la liga española sean el Barcelona y el Girona, ambos con 16 puntos. Estos dos cuadros son los únicos invictos que permanecen en la competencia. Los merengues se quedaron en 15. Mientras, el Atlético llega a las 10 unidades, misma línea que el Valencia y el Rayo Vallecano, que empató con el Villarreal de Ben Brereton.