El ATP de Santiago mira hacia el Club de Polo

Se acerca el verano y con ello la temporada de eventos deportivos que en los últimos años ha sido bastante nutrida. Sin embargo, con la irrupción de la pandemia, la realización de estos certámenes está supeditada a la respuesta de las autoridades sanitarias, quienes tienen la última palabra al respecto. Es por ello que ya se trabaja en los protocolos para sus respectivas realizaciones.

Uno de los torneos más esperados es el ATP 250 de Santiago, cuyo inicio está programado para el 22 de febrero, según el calendario de la Asociación de Tenistas Profesionales. La familia Fillol, organizadora del certamen, está trabajando en los detalles para llevar adelante la segunda edición del campeonato, que este año tuvo un gran éxito de público gracias al excelente momento de Christian Garin, quien venía de ganar los títulos de Córdoba y Río de Janeiro

Precisamente la ausencia de espectadores producto de la pandemia llevó a la producción a buscar alternativas. La primera decisión tiene que ver con el cambio de recinto: es altamente probable que no se lleve a cabo en San Carlos de Apoquindo, sino en el Club de Polo y Equitación San Cristóbal.

Desde el Ministerio del Deporte, el subsecretario Andrés Otero reconoce las conversaciones y un eventual cambio de sede. “Hemos tenido reuniones para analizar los protocolos sanitarios, y la llegada de los jugadores, entrenadores y árbitros desde el extranjero, siguiendo la misma línea que hemos aplicado para los partidos de Copa Libertadores y Sudamericana y que han dado buenos resultados. Sobre la presencia de público, no hay una petición formal de parte de la organización. Ellos nos han comentado que hay dos opciones: hacerlo en el Club de Polo o en San Carlos de Apoquindo”, afirma.

Sin embargo, la ventaja del reducto de Vitacura está en ser mucho más económico que las canchas de la UC, sobre todo en un escenario sin público o de aforo restringido. A ello se suma que el emblemático establecimiento es un lugar bastante familiar para la organización, ya que ahí comenzó el sueño de traer de vuelta el ATP a Chile, con la realización de un challenger entre 2015 y 2017, cuya última versión fue ganada por Nicolás Jarry.

Desde SACS, la productora a cargo, prefirieron no entregar declaraciones sobre este tema, aunque esperan referirse prontamente a esta situación.

Originalmente, cuando se anunció el regreso del circuito 250 a Chile, se dijo que la sede sería el Estadio Nacional. No obstante, el escaso margen de tiempo llevó a los organizadores a trasladar la sede a San Carlos de Apoquindo, con la promesa de volver en el futuro. No obstante, esa aspiración sigue muy lejos de concretarse.