El Barcelona lo hizo. Más allá de alguna cuota de incertidumbre durante el segundo tiempo, construyó una goleada sobre el Sevilla para dar vuelta la serie e instalarse en las semifinales de la Copa del Rey. Fue 6-1 en el Camp Nou.

La misión era remontar el 2-0 que alcanzaron los sevillistas en la ida, generando muchas dudas de cara al desenlace de la serie. Por lo mismo, salieron a la cancha con su once estelar, salvo por la presencia del holandés Cillessen en el arco (es el titular en la Copa). A la larga, el golero fue una de las figuras. En esa alineación de gala no asomó Arturo Vidal, quien arrancó el partido en la banca. El Rey ingresó en los 75' por Ivan Rakitic y se dio el gusto de participar en las jugadas que acabaron en los últimos dos goles de su escuadra.

El dominio fue general para los azulgranas. En el primer tiempo se reflejó en que se fueron al descanso ya con el marcador global igualado. El 2-0 parcial lo establecieron Coutinho (13', de penal) y Rakitic (31'). En el medio, Cillessen le contuvo un penal a Banega. En el complemento, el partido fue mucho más atractivo. Al Barça le bastaron dos minutos para quedar 4-0 arriba, gracias a Coutinho (53') y Sergi Roberto (54'). El Sevilla descontó vía Guilherme Arana (67'), lo que encendió el desarrollo del cotejo porque quedaron a un tanto de la clasificación debido al factor del gol de visita. Pero en el epílogo, el local cerró la victoria con tantos de Suárez (88') y Messi (90'+2'), este último concluyendo una jugada colectiva notable.

"Queremos ganar todo, no tiramos nada... Algunos decían que tirábamos la Copa pero este equipo quiere luchar por todas las competiciones, como todos los años", declaró el capitán Lionel Messi, consumado el pase a la siguiente fase.

Así, el Barcelona se instala entre los cuatro mejores de la Copa del Rey, junto al Valencia y al Betis. Hoy se define al último clasificado: Girona o Real Madrid. Las llaves de semifinales serán sorteadas.