Este domingo, el Betis disputó su último partido del año. En su casa, el Estadio Benito Villamarín, bajó el telón de 2024 con una igualdad que deja un mal sabor. El equipo que comanda Manuel Pellegrini empató 1-1 con el Rayo Vallecano, por la fecha 18 de la liga española. Este resultado le genera a los verdiblancos mirar con distancia sus objetivos.
La escuadra de Heliópolis debía reinsertarse en la escena local luego de su clasificación a los playoffs de la Conference League, alcanzada el jueves pasado. Si bien la misión del equipo era acceder directamente a los octavos de final del tercer certamen en relevancia que tiene la UEFA, considerando el escaso tonelaje de los adversarios (salvo excepciones como el Chelsea), cumplió con un mínimo que era continuar en carrera. En esa dirección, deberá chocar en la serie de dieciseisavos de final con el Gent de Bélgica.
Para recibir a los de Vallecas, la gran novedad fue la presencia desde el primer minuto de Isco Alarcón, el talentoso mediocampista ofensivo que volvió a la consideración de Pellegrini al superar una extensa lesión. Fue su tercer partido desde que volvió a la cancha, pero fue el primero como titular. En la labor creativa, el ex Real Madrid fue por el centro, acompañado por Giovani Lo Celso y Ez Abde, con Vitor Roque siendo el centrodelantero. En el rival, el colombiano James Rodríguez ni siquiera fue al banco, estirando su mal pasar en LaLiga.
Un triunfo le permitía a los béticos instalarse en la séptima posición de la tabla, entrando de lleno en la pelea por clasificar a las copas. Quizás aquello influyó en el buen arranque de partido. Los pupilos del Ingeniero iniciaron volcados en campo rival, quitándole el control de la pelota al Rayo. Sin embargo, ese ímpetu fue decayendo con el paso de los minutos. De hecho, el partido se fue tornando aburrido. Sin emociones en las áreas. En los 31′, la visita llegó al gol a través de Adrián Embarba, pero fue anulado por fuera de juego.
El quiebre en el tedio que inundaba el compromiso se dio con un polémico penal a favor del Betis, por falta sobre Vitor Roque. En los 37 minutos, ejecuta Isco y el exjugador del Málaga bate a un conocido del medio local: el golero argentino Augusto Batalla (ex La Calera y O’Higgins). El 22 de los béticos no hacía un gol desde el 12 de mayo, al Almería.
El Betis no dio con el arco
Con un gol en el bolsillo, los andaluces debían ratificar de una manera más clara la ventaja. Pero el complemento entregó con prontitud la igualdad del Rayo Vallecano. En los 51′, un gran zurdazo de larga distancia de Isi Palazón puso el 1-1 en el marcador. La estirada del meta Fran Vieites no alcanzó para desviar el remate. El relevo del luso Rui Silva no otorgó para los suyos la seguridad necesaria a lo largo del juego.
El empate obligó al Betis a plantear una reacción. Generó algunas situaciones de gol ante el arco de Batalla, como por ejemplo un remate cruzado de Vitor Roque (56′) que se fue desviado, tras un hermoso pase de taco de Isco. Pellegrini movió el tablero con las entradas de Diao y Pablo Fornals, para refrescar la zona ofensiva.
En el cuarto de hora final, los verdiblancos se fueron con todo a buscar la victoria. En los 75′, Vitor Roque se perdió un mano a mano ante Batalla, mientras que cuatro minutos después un remate de Perraud se fue elevado por poco. La intención ofensiva no alcanzó para dar con el blanco.
Por lo tanto, el Betis cierra 2024 con un descafeinado empate, que no le ayuda de mucho. El equipo del chileno Manuel Pellegrini queda en la novena posición de la tabla con 25 puntos, fuera de la zona de clasificación a las copas (el sexto, Mallorca, tiene 30). Para contrastar, el líder es el Atlético de Madrid, que suma 41 unidades luego de vencer al Barcelona, en Cataluña.