El Betis de Manuel Pellegrini volvió a sumar. Tras su reponedor triunfo frente al Osasuna como visitante —luego de tres derrotas consecutivas—, los béticos empataron como locales frente al Villarreal por 1-1, lo que los deja en la séptima posición de la La Liga. Claudio Bravo aún sigue recuperándose de sus dolencias musculares y ni siquiera fue citado.
No se trataba de un partido fácil. El Villarreal, ex club del Ingeniero, está encaramado en las primeras posiciones de la tabla bajo la conducción de Unai Emery. El Submarino Amarillo llegó al Benito Villamarín en la cuarta posición, con cinco triunfos, seis empates y apenas una derrota.
El favoritismo lo hizo vale a los cinco minutos, con Pau Torres conectando un cabezazo tras centro de Dani Parejo. Un mazazo para el cuadro de Pellegrini que hacía presagiar lo peor, no solo por el tempranero tanto, sino por el dominio que siguió tras la apertura de la cuenta.
Pero los verdiblancos lograron aguantar, y una seguidilla de lesiones en el Villarreal —debieron salir Iborra y Estupiñan en la primera mitad, y Coquelin en la segunda— permitieron que emparejaran las acciones del encuentro. Así, el Betis devolvió la mano y a los seis minutos de iniciado el complemento. Aitor Rubial colocó el empate con un golazo desde fuera del área, tras captar un despeje rival.
El Betis está séptimo con 16 puntos, a dos unidades de la Europa League. Sin embargo, por lo peleado que está el fútbol español, solo cinco puntos lo separan de la zona de descenso.