El Betis de Pellegrini sufre una eliminación dramática
El cuadro sevillano, donde también milita Claudio Bravo (hoy lesionado), no pudo aguantar la ventaja en el último minuto de los descuentos y, después del alargue, cayó en los penales frente al Athletic Bilbao.
En el último partido de los cuartos de final de la Copa del Rey, el Betis de Manuel Pellegrini, sin la presencia de Claudio Bravo por lesión, se enfrentaba al Athletic de Bilbao con la idea de estirar su buen rendimiento en lo que va de 2021. Y estuvo cerca de lograrlo, pero en el último minuto no pudo aguantar el triunfo, lo que al final hizo más dolorosa la posterior eliminación del certamen, en definición a penales.
En los primeros 45 minutos, el cuadro del chileno fue el dominador, sin tener claras oportunidades para anotar. Partido lento, jugado principalmente en el mediocampo. Las cosas cambiarían en el complementoo, con un Betis igual de dominante, pero mucho más incisivo. El Athletic, en cambio, apostó a un fútbol más rudo, sumando bastantes amonestados y la jugada polémica del compromiso, puesto que a los 49′, Yeray golpeó a Rubial sin pelota, lo que obligaba a una segunda tarjeta amarilla que no llegó.
Todo parecía alegría para los sevillanos, luego de que a los 82′ Juanmi, después de varios rebotes, anotara un gol de volea desatando la locura. La clasificación estaba en el bolsillo, pero los vascos dieron el golpe a los 93 minutos, cuando Raúl García anotó el empate tras una buena jugada de Iñigo Martínez.
El cansancio se notó en ambos equipos, lo que hizo un tanto aburrido el alargue. Los penales eran la única vía para definir al último semifinalista de la Copa. Y ahí, el Bilbao fue mucho más certero. Raúl García abrió la cuenta para los vascos y Mandi empató para el Betis. Iñaki Willians, Morcillo y Berchache también se inscribieron con sus tantos en la serie, mientras que Sergio Canales y Juanmi fracasaron en sus intentos, lo que sentenció el 4-1 final para el Athletic.
La peor forma de quedarse fuera. Cuando todo parecía encaminado. En el último suspiro. Pellegrini y Bravo se quedan sin la Copa del Rey y ahora se concentran exclusivamente en la Liga, donde el gran objetivo es meterse en los puestos de copas de internacionales.
Después del compromiso, el entrenador nacional reconoció el dolor de la eliminación, por la forma: “El camarín quedó tocado, por supuesto, había ilusión por seguir en esta Copa. Además creo que jugamos un partido ante un rival muy difícil que venía de ganar al Real Madrid y al Barcelona. Creo que fuimos superiores, que merecimos ganar, pero en el fútbol dos o tres pelotas puntuales cambian un resultado”.
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