Alexander Bolaños llegó a Chile en 2016. Lo reclutó Colo Colo con la aspiración de que se convirtiera, en el mediano plazo, en la nueva figura de su ataque. En Ecuador ya se hablaba de sus condiciones. No por nada, también fue considerado en las selecciones menores del país del Guayas. En Chile, en todo caso, no le fue bien. En el Cacique, donde estuvo hasta 2018, jugó apenas dos partidos. Además, militó en Deportes Concepción hace dos años. En los lilas su presencia fue mayor: en 15 encuentros marcó tres goles. Finalmente, también se ligó al fútbol joven de O’Higgins.
Hoy, sin embargo, el atacante está en la mira. En Ecuador es protagonista de un escándalo que, de acuerdo a sus antecedentes, pudo generarles inconvenientes a ambos equipos nacionales: le acusan de adulterar su identidad y, por cierto, su edad. Afirman, concretamente, que tiene más que los 24 años que luce formalmente en los registros futbolísticos. Por esa razón, fue suspendido con tres años de inactividad.
La acusación
La situación evoca inmediatamente la de Byron Castillo, el defensor que defendió irregularmente a Ecuador en las Eliminatorias para el Mundial de Qatar. Aunque Chile probó que había nacido en Colombia, la FIFA no sancionó a la federación del Guayas con la marginación del evento planetario, el objetivo que tenía la federación chilena, que se apoyó en la asesoría del abogado brasileño Eduardo Carlezzo. Eso sí, estableció castigos para las Eliminatorias en curso.
En Ecuador afirman que Alexander Bolaños es, en rigor, Yancel Romario Bolaños y que tiene cinco años más de los que aparecen en los registros del fútbol.
Hace un tiempo, Genaro Huacón, quien aseguró ser el representante del jugador, destapó la situación. “En 2012 yo llevé a Alexander a Portoviejo (ciudad de Ecuador). En ese momento no se podía hacer la transferencia por un tema de edad y ahí hicimos el cambio de nombre y de fecha de nacimiento. Él no se llama Alexander, se llama Romario, ese es su verdadero nombre. Tiene cambiada la cédula. Está adulterada la fecha de nacimiento también. Es mayor de 24 años”, declaró en la radio uruguaya Sport890.
Documentos y advertencia
En el testimonio, Huacón asegura que advirtió a Independiente del Valle del peligro que implicaba fichar al jugador y de la forma en que su familia intentó evitar que destapara el conflicto. “Yo tuve y tengo la cédula original del jugador. En 2016 su tío me ofreció dinero a cambio de mi silencio. Me pidieron confidencialidad en el tema. Desde ese momento hasta ahora no me han pagado nada. Si me hubiesen pagado yo no decía nada. No me pagaron nada y por eso estoy denunciando esto. Yo advertí al presidente de Independiente del Valle de que si utilizaban a Bolaños podían ser sancionados”, puntualizó.