El Celta de Vigo le robó un empate al Barcelona con Arturo Vidal todo el partido. En un duelo válido por la jornada 32 de La Liga, el cuadro culé igualó 2-2 en su visita al Municipal de Balaidos, consiguiendo un punto que le permite regresar momentáneamente al liderato del torneo. Espera por lo que haga el Real Madrid este domingo frente al Espanyol (16.00 horas). El chileno fue titular y tuvo una correcta actuación.
El Barça asumió de entrada el protagonismo, aunque cometió errores que le hicieron sufrir más de la cuenta. Se adueñó de las acciones y no le prestó la pelota a su rival, que apostó al contragolpe desde el principio. Con un activo Vidal, quien disputó su tercer partido consecutivo como titular en el torneo, la visita se instaló en terreno adversario y manejó el encuentro con comodidad.
El oriundo de San Joaquín actuó como un vigilante que se paseó atento por toda la cancha. Con pierna fuerte en defensa y con hambre de gol en ofensiva. Funcionó, además, como un repartidor. Demostró su buen toque en los ataques culés y, cada vez que su escuadra perdió el balón, fue el primero en picar velozmente para recuperarlo. Más en el primer lapso que en el segundo, el Rey exhibió la intensidad y potencia que acostumbra, generando incluso faltas en su contra en los alrededores del área local.
De hecho, la apertura de la cuenta salió de una infracción sobre el Rey. El encargado de ejecutar, en los 20′, fue Lionel Messi, otro de los buenos jugadores del campo. Y cuando los hombres del Celta armaban una barrera especial para evitar que la temida zurda del argentino inaugurara los festejos, este asistió a un solitario Luis Suárez, quien, con un cabezazo, puso el 0-1.
Los de Quique Setién no se conformaron el tanto y fueron por más. Siguieron instalados en campo rival y con posibilidades de aumentar las cifras. Vidal pudo hacerlo en los 33′. Luego de un ataque construido de los forasteros, el chileno probó suerte sin éxito con un remate, ante la mirada de varios de sus compañeros que le pedían el centro.
Los dueños de no pudieron aprovechar las únicas dos chances que tuvieron en los 45′ iniciales para conseguir la paridad. La primera de ellas fue gracias a un error de Ter Stegen. El alemán se complicó en la salida y le dejó la opción servida a Fiódor Smólov, quien controló más de la cuenta mientras Iago Aspas, el mejor de los Celtistas, ingresaba solo por el punto penal. Minutos más tarde, fue este último quien resolvió mal un contragolpe.
El panorama se oscureció para el Barça en el inicio del complemento. Un pase en profundidad encontró mal ubicada a la zaga culé. En efecto, Okay Yokuşlu ganó todos los metros posibles por la banda derecha para esperar que Smólov, autor del empate en los 50′, llegara en solitario al punto penal para empujar la pelota al fondo de la red.
Con el 1-1 en el marcador, el cotejo comenzó a jugarse de ida y vuelta. Y fue ahí cuando, en los 67′, apareció nuevamente Suárez para sacar a los suyos del apuro. El uruguayo recibió un pase de Messi en el área, giró y con un zurdazo volvió a poner en ventaja al equipo del oriundo de San Joaquín.
Pero el Celta no se quedó de brazos cruzados y obtuvo su premio a la insistencia. En los 87′, una falta en la entrada del área le dio una oportunidad única a Aspas, quien no la desperdició. Clavó el tiro libre en el arco de Ter Stegen y, de paso, le propinó un golpe en la nuca los culés, quienes, con el empate, podrían ceder terreno en la pelea por el título. A segundos del final, el meta visitante salvó a su equipo de la derrota sacándole una pelota de gol a Nolito. El Barça tuvo unos últimos minutos para el olvido e igualó cuando perfectamente pudo ser derrotado.
Con este resultado, el Barcelona trepó hasta el primer lugar de La Liga y aguarda por lo que haga este domingo el Madrid. La próxima fecha, recibirán en el Camp Nou al Atlético Madrid en un duelo que está programado para el martes 30 de junio, desde las 16.00 horas de Chile.