El City le da un nuevo cachetazo al United: se impone en el clásico y deja en la cuerda floja a Solskjaer

El Manchester City le dio un nuevo cachetazo al Manchester United. El conjunto ciudadano se impuso por 0-2 en el clásico y, de paso, dejó en la cuerda floja a Ole Gunnar Solskjaer, quien sumó un nuevo fracaso con los Diablos Rojos, que, hace dos jornadas, cayeron por 0-5, también en Old Trafford. Los celestes, en tanto, escalaron al segundo puesto de la Premier League, ubicándose a dos puntos del líder el Chelsea y uno por encima del Liverpool, dos equipos que, eso sí, aún deben jugar sus partidos.

El primer tiempo fue un monólogo absoluto de los dirigidos por Josep Guardiola. Pese a que en el arranque daba la impresión de que se trataría de un compromiso parejo, con una llegada por equipo en menos de seis minutos —un remate de Bernardo Silva que se fue elevado y un cabezazo desviado de Harry Maguire—, lo cierto es que los 45′ iniciales fueron una pesadilla para Cristiano Ronaldo y compañía.

Esa pesadilla demoró apenas siete minutos en comenzar. Y de qué manera para los dueños de casa. Los forasteros explotaron su mejor banda: la izquierda, que contó con unos encendidos João Cancelo y Phil Foden. Fue el primero de estos el que se proyectó por el carril y centró rasante para que Eric Bailly, en su intención de despejar, enviara la pelota al fondo de la portería defendida por David De Gea.

El autogol fue solo el principio de una jornada de sufrimiento para los locales. Aquello se reflejó en CR7, quien, tras el 0-1, se llenó de lamentos, para luego aplaudir e intentar levantar a los Diablos Rojos. El portugués tenía una cita con la historia, puesto que se encuentra a dos conquistas de convertirse en el primer futbolista en alcanzar las 800 dianas en el profesionalismo. Tuvo una chance de marcar en los 26′, con una volea de zurda que Ederson evitó con una gran reacción. Mason Greenwood se encontró encima con el rebote y erró incómodo a arco vacío.

La llegada que protagonizaron el Bicho, que estuvo muy huérfano en ataque, y el joven ariete fue la única de peligro para una escuadra que estaba dormida y que, de momento, no caía por un peor resultado solamente gracias a la gran actuación de David De Gea. El español evitó que el United se fuera goleado al descanso. En los 28′, le impidió a Gabriel Jesus el segundo, al igual que a Cancelo un minuto después y luego en los 35′. En los 33′, le sacó lo que era un nuevo gol en contra a Victor Lindelöf.

Hasta que el City encontró el segundo. Algo que parecía ser solo cuestión de tiempo, porque su superioridad en la cancha fue clara. En los 46′, Cancelo volvió a centrar desde el carril zurdo y Luke Shaw, de manera insólita, dio por perdido un balón increíble, que Silva conectó cerca de la línea de fondo para dejar sin opciones a De Gea y ampliar la ventaja para la visita. El resultado, como no siempre es en el fútbol, se ajustaba a lo que ocurría en Old Trafford.

Con el 0-2, los Citizens administraron el juego y se dedicaron a adormecer el partido, ante un rival que fue un fantasma en el campo desde el comienzo y que no mejoró con los cambios. Solskjaer apostó por los ingresos de Jadon Sancho y, posteriormente, de Marcus Rashford. Pero de nada sirvió para lograr el alza de sus pupilos, que seguían corriendo detrás de la pelota ante un adversario que impuso el ritmo del cotejo, sin generar mucho daño en el complemento. Tuvo para liquidar, con un zurdazo de Foden, en los 82′, que dio en el vertical izquierdo de De Gea.

Sin despeinarse demasiado y quitándole cada vez más el pie al acelerador con el paso de los minutos, aunque sí manejando el balón en suelo contrario, los de Guardiola amarraron un nuevo triunfo en la Premier para acercarse a la cima de la tabla. No muy difícil, eso sí, se la hizo el United, que perdió otro clásico en menos de dos semanas. Manchester se tiñó de celeste.