El clásico de la NBA es para los Boston Celtics: Jayson Tatum frena a los encendidos Lakers de Luka Doncic

Al igual que en la década de los ‘80, los Boston Celtics y Los Angeles Lakers volvieron a animar una batalla de colosos en la NBA. En el denominado ’clásico' de la liga -debido a la rivalidad histórica que ambos mantienen-, el conjunto del irlandés se hizo fuerte en el TD Garden y batió por 111-101 a unos californianos que venían en llamas tras cosechar ocho victorias al hilo de la mano de Luka Doncic y LeBron James.

El encargado de detener a la locomotora angelina fue Jayson Tatum. El alero, figura de los vigentes campeones, firmó una actuación sobresaliente para ganar el enfrentamiento 346 entre las dos franquicias más ganadoras de la mejor liga de baloncesto en el mundo. Además, Jaylen Brown, su compañero y segunda espada ofensiva, tampoco decepcionó y tuvo una gran contribución en ambos sectores de la cancha.

Los Angeles Lakers tenían la intención de seguir elevando su cartel de favoritos al título este sábado por la noche. De la mano de la nueva dupla de superestrellas conformada por Luka Doncic y LeBron James, el elenco púrpura y oro llegaba al Estado de Massachusetts con una sensación inmaculada de triunfos y alegrías: en los últimos ocho compromisos habían conseguido victorias contra importantes equipos de playoffs como los Denver Nuggets de Nikola Jokic, Los Angeles Clippers de James Harden y los New York Knicks de Jalen Brunson.

Sin embargo, en esta oportunidad, se iban a encontrar con un oponente que no estaba dispuesto a que festejaran en su propia. Los Boston Celtics, tal y como en tantas definiciones de los ‘60 y ’80, iban a ser los verdugos.

Con los 40 puntos, 12 rebotes y ocho asistencias de un Jayson Tatum inspirado, sumadas a las 31 unidades y tres robos del siempre cumplidor Jaylen Brown, los verdiblancos dieron un golpe a la mesa y dejaron en claro que no se van a dejar asustar por el dueto estelar de los angelinos.

Doncic así lo entendió. A pesar de que consiguió marcar 34 puntos y se inscribió con otros ocho rebotes, el esloveno sufrió con la intensa defensa que mandó el director técnico Joe Mazzula en los últimos minutos cuando el juego estaba apretado. Algo que ya padeció en las Finales del 2024 (cuando estaba con los Dallas Mavericks) y que puede volver a pasar si es que se cruzan en una hipotética nueva instancia decisiva. En ese sentido, el balcánico debe mejorar en este apartado si es que quiere sobrevivir la intensidad que se vive en la postemporada.

En contraparte, lo que sucedió con LeBron James igualmente preocupa a largo plazo. El Rey estuvo sobre el parqué hasta los minutos finales del último cuarto, ya que debió salir por una molestia en la ingle. Pese a esto, se retiró a los vestuarios bordeando el triple doble en su línea estadística: 22 puntos, 14 rebotes y nueve asistencias.

Con este mazazo que los baja de las nubes, los Lakers se preparan para retomar el rumbo en una gira de partidos de visitante y asi mejorar el récord de 40-22 que los tiene terceros en el Oeste: deberán ser forasteros ante los Brooklyn Nets, Milwaukee Bucks y Denver Nuggets.

Por el lado opuesto, los Celtics que marchan segundos del Este con un registro de 46-18, tendrán dos juegos seguidos de local, siendo el segundo contra un rival de peso: se miden a Utah Jazz y luego a Oklahoma City Thunder, el puntero del Oeste.