A primera hora de este jueves, la ANFP y la ANFA, los dos organizadores de la Copa Chile, se reunieron para determinar qué sucedería con el partido entre Universidad Católica y Universidad de Chile, por la Copa Chile. Este miércoles, el duelo fue suspendido a los 5′ tras las bombas de estruendo que cayeron a solo unos metros del portero azul Martín Parra, quien cayó al césped y tuvo que ser trasladado a la Clínica.
En la cita, finalmente, se decidió que el duelo se reprogramará y se jugará el tiempo restante del partido de vuelta, según la información recabada por El Deportivo. Si bien la ANFA, a través de su presidente, Justo Álvarez, propuso descalificar a la Universidad Católica por los serios incidentes, lo cierto es que no existe fundamento legal para aplicar la máxima sanción contra los cruzados. Durante los próximos días, se determinará la fecha de los 85′ de juego restante. La votación para buscar nueva fecha para el cotejo fue 4-3, con los tres votos de la ANFA y el restante de la ANFP.
Lo que también determinó el directorio, independiente de la resolución del Tribunal de Penalidades, es que la UC jugará, al menos, todo lo que resta de la Copa Chile sin público.
Además, el directorio de la sede de Quilín denunciará al Tribunal de Penalidades a Cruzados. Se buscarán sanciones ejemplificadoras, tanto económicas como deportivas, según establezcan las bases. Se presentarán cargos judiciales contra las dos personas que fueron detenidas en el sector de la barra de Universidad Católica, uno de ellos está identificado como quién activo los fuegos artificiales y el otro portaba una mochila llena de bengalas.
Ayer, Michael Clark, el presidente de Azul Azul, solicitaba a la ANFP que le entregaran los tres puntos del duelo. “Tiene que haber un antes y un después (...). No puede ser que acá se tire una bengala y este partido se suspenda y a los días juega de nuevo. Este partido se tiene que dar por terminado; acá tiene que haber señales. Señales deportivas, señales institucionales y señales económicas. Esto no puede seguir pasando. La barra del club organizador ya tuvo problemas. Este partido se debió haber jugado sin público. Una mala organización... cómo tratan a los dirigentes hasta los jugadores y nosotros vamos a perseguir responsabilidades de los autores materiales, porque esto no puede volver a suceder. Esperamos que la Federación actúe con el mismo rigor”, declaró.
“Estamos jugando cosas muy importantes y la verdad es que nosotros esperamos que el partido se dé por terminado y se dé por ganador a Universidad de Chile, que por justicia, es lo que corresponde. Porque no puede ser que baste con tirar un petardo, se suspenda el partido y aquí no ha pasado nada. Esto no puede ser”, prosiguió.