El desafío de un equipo de circunstancias

El día que se conoció que Suecia era rival de Chile, la noticia se tomó con alivio en la huestes nacionales. Con Christian Garin peleando el top 30 en ese momento y Nicolás Jarry contratando al exentrenador de Kei Nishikori, los pronósticos para la serie de este 6 y 7 de marzo en Estocolmo eran alentadores.

Tres meses después el favoritismo cambió. Garin se bajó por una dolencia en la espalda y la carrera de Jarry quedó en suspenso por dopaje. Así, la responsabilidad de encabezar el equipo quedó en las espaldas de Alejandro Tabilo (173º) y Tomás Barrios (282º), dos promisorios jugadores, que si bien están lejos en el ranking de los dos ausentes, han tenido un alentador comienzo de temporada.

Tabilo superó las clasificaciones del Abierto de Australia y avanzó hasta la segunda ronda. Luego, en el ATP de Santiago avanzó hasta octavos de final del certamen, en el que fue invitado.

Barrios ganó en Lima un M25 y fue finalista en otro. También respondió al wild card que recibió el ATP chileno y se metió a octavos de final.

Como dupla, alcanzaron en la capital sus primeras semifinales en el ATP de Santiago, lo que les permitió ascender más de 100 lugares en el ranking. Tabilo es 276º (+125) y Barrios es 285º (+146).

Ambos ayer entrenaron en Estocolmo y confían en un buen desempeño, ya que han tenido buenos rendimientos en canchas rápidas a lo largo de su carrera. A ellos se suman los debutantes Bastián Malla (523º) y Matías Soto (879º). Este último participa en el circuito universitario, que se desarrolla mayoritariamente en cemento.

El equipo sueco, en tanto, apuesta al buen momento de Mikael Ymer (67º), quien tuvo un gran 2019 ganando challengers. Esta temporada ha jugado solo en superficies duras y no ha pasado de los octavos de final.

En tanto, su hermano Elías (202º) tuvo un 2019 bajo y este año apenas ha jugado un solo encuentro, la segunda semana de enero.

En dobles, su gran carta es Robert Lindstedt, de 42 años y ex número tres del mundo en duplas. Hoy se ubica 79º y quema los últimos cartuchos de su carrera.

Chile sufre con las bajas, pero sueña en Estocolmo.