El deseo de reforzarse vs. el ajustado presupuesto de Blanco y Negro: el proyecto deportivo de Gustavo Quinteros en Colo Colo vive un día clave

Este jueves se vivirá una jornada vital para el futuro del proyecto deportivo de Colo Colo. Ese que busca asegurar la continuidad de Gustavo Quinteros y que apunta a competir internacionalmente con mejores armas que en este 2022. En las últimas semanas, el DT ha manifestado claramente cuál es su postura y para ello ha ido trabajando una propuesta con el gerente deportivo Daniel Morón, con quien expondrá los alcances de esta en la reunión de la Comisión de Fútbol, programada para esta tarde.

“Los directores, la hinchada, los jugadores, el cuerpo técnico queremos dar un paso más y seguir trabajando de la mejor manera para poder tener la próxima temporada un equipo tal vez mejor que el de este año, donde nos faltó muy poquito para avanzar en copa, que logramos los títulos locales, pero que no nos alcanzó internacionalmente. No es solo un deseo mío, sino que de todos. Lo importante es tener todo listo lo antes posible para que sea aprobado por el directorio”, comentó hace unos días el entrenador.

Mientras que el presidente de Blanco y Negro, Alfredo Stöhwing, también dio algunas luces de lo que será el encuentro al que calificó como el punto de partida para el nuevo proyecto. “Es el inicio para ver las cosas que hay que ver, como renovaciones, juveniles, jugadores que vuelven de préstamos y probables contrataciones”, dijo ayer, en el marco de la visita del plantel al Centro Penitenciario Femenino de San Miguel.

En esa misma línea, el timonel se mostró confiado en la continuidad del santafesino. “Él está trabajando con nosotros y todos estamos permanentemente conversando para tomar las medidas para el próximo año”, expresó, en medio de ofertas y sondeos por el estratega desde Argentina y Brasil. Sin embargo, resta ponerse de acuerdo en las cifras del proyecto deportivo, lo que sin duda promete generar un debate intenso.

En la mesa de la concesionaria están atentos a la propuesta que presenten el técnico junto con el gerente deportivo, ya que es vital conocer sus alcances para cuadrar el presupuesto de la próxima temporada, el que contará con varios ingresos, como los US$ 3 millones por clasificar a la fase de grupos de la Copa Libertadores, los US$ 3 millones del contrato con Coolbet, el nuevo main sponsor, y también los US$ 5 millones por la venta de Pablo Solari a River Plate, entre otros dineros. No obstante, desde Macul advierten que cerca de un tercio de los montos obtenidos por la participación en el certamen continental serán destinados a pagar las multas impuestas por la Conmebol por el mal comportamiento de los hinchas esta temporada y también otra porción se utilizará para cancelar los premios al plantel.

Asimismo, de las cifras por la venta del Pibe hay sumas que se fueron directo a cubrir deudas de arrastre que dejó la pandemia, cuando los equipos estuvieron obligados a jugar sin público, ya que el 30% de los ingresos proviene de la recaudación y el haber jugado un año sin hinchas locales afectó duramente las finanzas institucionales. Ahí el club perdió $ 300 millones por partido de local y además en ese periodo fue condenado a devolver completamente los sueldos del plantel durante los tres meses que la institución se acogió a la Ley de Protección al Empleo. También en esa etapa los costos aumentaron en un 12%. Todo esto obligó a un fuerte plan de ajuste que comenzó en la administración de Edmundo Valladares y continuó en la de Stöhwing, lo que permitió normalizar los números y proyectar cifras azules para sus próximos estados financieros.

Tomando en cuenta ese escenarios y que todavía hay que desembolsar US$ 900 mil por el pase de Juan Martín Lucero, en ByN avizoran que seguramente se necesitarán varias reuniones para poder ir afinando y ajustando esas necesidades. Asimismo, nombres como los de Carlos Palacios, Joaquín Montecinos o Erick Pulgar son opciones que están sobre la mesa, pero que deben destrabar la salida de sus clubes, por lo que no asoma como algo sencillo ni tampoco barato. Mientras que Cristopher Toselli, otro de los apuntados, está más alcance, ya que finaliza su relación con Central Córdoba y en Universidad Católica no lo tienen considerado. Si se concreta la llegada del exarquero de la UC, lo más probable es que Omar Carabalí parta a préstamo.

En esa perspectiva, Stöhwing insistió en la mesura y la responsabilidad financiera para el próximo año. “Los otros países tienen presupuestos más altos en corto plazo. Podemos ir construyendo un proceso, con un buen plantel e ir reforzando para hacerlo más competitivo. No quiero prometer algo que no puedo cumplir. Tenemos más recursos de eficiencia y ganas que recursos económicos para prometer un salto de calidad. Esto es un proceso”, expresó anoche en una entrevista con Directv.

Es por eso que hay expectación en la concesionaria por conocer cuál es la propuesta de Gustavo Quinteros y Daniel Morón. Si los deseos del entrenador se acercan a los números de Blanco y Negro, habrá luz verde para conformar un plantel que se ajuste al objetivo de dar un paso más. De lo contrario, el panorama se complicará.