Cuando se desplomó el árbitro Víctor Hugo Hurtado (32 años), en el duelo de ayer entre Always Ready y Oriente Petrolero, nadie pensó que el desmayo terminaría en tragedia. Tampoco Raúl Olivares, el portero chileno que defiende al equipo banda sangre, que presenció desde el mismo campo de juego como toda la desgracia ocurría.
"Seguimos jugando porque nadie pensó que él fallecería. Al final del partido, en el camarín, nos enteramos de que Víctor había muerto. Fue muy fuerte. Muchos lloramos y también oramos para que descansara en paz. Lo conocíamos, a nadie se le pasó por la cabeza que algo así ocurriría", reconoce La Araña.
Olivares, aún consternado con el fallecimiento de Hurtado, recuerda cómo todo ocurrió. "Estaba al frente mío y vi cuando se desvaneció. Inmediatamente pedimos que ingresara la camilla para que fuera atendido en la ambulancia, pero hubo una descoordinación y no sabían si entrar con camilla o con ambulancia. Se demoraron como cinco minutos en atenderlo", critica. Incluso pensó que se iba a recuperar: "Cayó y fue examinado por los médicos de mi club. Allí lo comenzaron a reanimar y balbuceó unas palabras, entonces pensamos que iba a estar bien"
El formado en Colo Colo recuerda incluso que conversó con Hurtado minutos antes de que todo ocurra. "Al entretiempo incluso hablé con él. Lo conocía, entonces bromeábamos. Le dije que el equipo rival estaba haciendo mucho tiempo y me dijo que lo iba a controlar para que no siguiera pasando", se lamenta ahora.
Nulos controles
Bolivia posee los estadios a mayor altura del mundo y, de hecho, el estadio El Alto es el recinto deportivo más elevado del planeta, construido a 4.090 metros sobre el nivel del mar. Esto podría haber sido parte de las causas de la tragedia, algo que el ex Cobreloa relativiza. "Es el estadio más alto del mundo, es cierto, pero no creo que solo eso hubiese afectado a este lamentable final. Víctor era joven y además es de Cochabamba, una ciudad que también es de altura. Puede que el problema lo haya gatillado la altura, pero deben haber otros antecedentes que no conocemos. Hay que esperar a la autopsia"
Eso sí, el portero nacional asegura que las condiciones para prevenir tragedias de este tipo son casi nulas en el fútbol altiplánico. "Cuando firmé con el club, por ejemplo, no se me hizo ningún examen médico para determinar alguna condición cardíaca. Claro, venía de jugar en Calama, que también está en altura, pero no me hicieron ningún tipo de test", cuenta la Araña.
Ante el suceso, el arquero asegura que existe preocupación por el accidente. Si bien, fue un hecho muy extraño en la liga boliviana, muchos están intranquilos. "No se acostumbra a hacer test de esfuerzos para los jugadores, imagino que mucho menos para los árbitros. Es algo que, entiendo, se debe hacer todos los años y yo ya estoy pensando en hacerme uno", confiesa.