El 29 de marzo de 2022, en San Carlos de Apoquindo, la selección chilena que dirigía Martín Lasarte perdió con Uruguay y sentenció su suerte. Vio pasar muy lejos el tren rumbo al Mundial de Qatar. Después de 528 días, comienza una nueva historia ante el mismo rival. Si bien en el ambiente hay más dudas que certezas, la ilusión de regresar a la máxima cita del fútbol se hace inevitable. La Roja arranca las Eliminatorias Sudamericanas en el mítico Estadio Centenario de Montevideo, con la historia en contra y sin su valor más desequilibrante.
Alexis Sánchez se quedó en el país a causa de sus problemas físicos, toda vez que el delantero arrastra una extensa inactividad desde que finalizó la campaña anterior con el Olympique de Marsella. Además, el goleador histórico de la Selección no tuvo pretemporada producto de la larga definición de su futuro, que finalmente conllevó su retorno al Inter de Milán. En estricto rigor, el tocopillano no juega desde el 20 de junio, en el amistoso con Bolivia que terminó sin goles, en Santa Cruz de la Sierra.
Las últimas evaluaciones antes de embarcarse rumbo a Uruguay determinaron que el seleccionador no quisiera arriesgar a Sánchez, prefiriendo que se quede en el país y se ponga a punto de cara al encuentro del próximo martes ante Colombia, en el Monumental. Por cierto, tampoco es segura la presencia del Niño Maravilla ante los cafetaleros. El jugador reaccionó a esta decisión a través de sus redes, publicando una historia en Instagram musicalizada con la canción Arrancármelo, de Wos. En ella se le ve entrenando bajo la lluvia en Pinto Durán, mientras sonaba la letra: “Y no tengo pensado hundirme acá tirado. Y no tengo planeado morirme desangrado...”.
Con este escenario, el más seguro reemplazante será Alexander Aravena, atacante de Universidad Católica, para acompañar a Ben Brereton Díaz en la ofensiva. El Monito dejó una grata impresión desde que entró en el régimen de la Roja, en aquel amistoso ante Paraguay, en el cual Chile remontó y venció a los guaraníes.
Otra duda en la formación de la Roja dice relación con el mediocampo y con la presencia o no de Arturo Vidal desde el arranque. En la práctica del miércoles estuvo Diego Valdés en la oncena, en lugar del jugador de Athletico Paranaense.
Con estas vicisitudes, además de la historiada ausencia de Claudio Bravo, Eduardo Berizzo ha preparado el arranque de las Clasificatorias, que significa su estreno oficial al mando del Equipo de Todos. Se terminaron los amistosos para el Toto. Ahora empieza la pelea por los puntos. O dicho de otra manera, se acabaron los ensayos. Nada puede quedar al azar, más aún con los antecedentes de dos procesos fallidos: hacia Rusia 2018 y Qatar 2022. Mirando el vaso medio lleno: el incremento en las plazas para la Conmebol (seis directas más una de repechaje) le da una esperanza adicional al equipo nacional.
Contra Bielsa y la historia
Remitiéndose solo a lo numérico, Chile llega a Montevideo en desventaja. La selección nacional nunca ha ganado en territorio uruguayo, tanto en duelos oficiales como amistosos. El mejor resultado en Clasificatorias fue el empate 2-2 rumbo a Sudáfrica 2010, con el doblete de Marcelo Salas. Con el formato de clasificación actual (dos ruedas, todos contra todos), la Roja debutó como visitante en seis ocasiones y nunca sacó una victoria. Logró dos empates: 1-1 con Venezuela, hacia Francia 1998, y 2-2 ante Argentina, rumbo a Alemania 2006. El único triunfo en un estreno fue jugando en Santiago: 2-0 a Brasil, en la ruta a Rusia 2018.
Al frente estará la Uruguay de Marcelo Bielsa, que también está en una etapa de búsqueda, porque el proceso del rosarino empezó hace algunos meses. El DT transandino ha impulsado una importante renovación en el equipo, no recurriendo a los históricos de la Celeste (principalmente Luis Suárez y Edinson Cavani). Respecto al plantel que fue al Mundial de Qatar, sólo se repiten 12 de 26.
Llegó el día D para la selección nacional y para Eduardo Berizzo. La primera misión de la Roja es salir airosa del Centenario.