El retorno de Marcelo Díaz a Universidad de Chile no pasó inadvertido. El jugador que fuese pieza fundamental en aquel equipo que lo ganó casi todo -al inicio de la década pasada- regresó al equipo de sus amores y este domingo volverá a decir presente en un Superclásico.
Partido que ha marcado al ahora capitán de los azules pues al menos hay dos episodios donde el volante ha sido protagonista y quedó en la memoria de ambas hinchadas. El primero de ellos fue muy criticado, ya que le enrostró sus genitales al público luego de igualar a dos frente al Cacique en el Estadio Monumental (2011).
“Pedí disculpas publicas a TODOS apenas vi la imagen en la que hacia el gesto porque me dio vergüenza y cargo de conciencia”, escribió en sus redes sociales al recordar el hecho y detalló que lo realizó para demostrar que su equipo tenía huevos (habían empatado con dos jugadores menos) y no para ofender.
Pero sin duda, uno de los sucesos más recordados ocurrió un año después, cuando Díaz estaba a punto de emigrar a Europa y se aprestaba a jugar su tercera final consecutiva en el Campeonato Chileno. Todo ocurrió en una rueda de prensa. Los estudiantiles le habían dado vuelta la semifinal a los blancos, al ganarles por 4-0 en el Estadio Nacional y remontar de esta forma el 2-0 que había recibido en el Monumental.
“Oye... préstame esa bebida.... préstame esa bebida”, es lo primero que dice Carepato frente a los periodistas que esperaban sus declaraciones previas al compromiso con O’Higgins y que quedó grabado en la cámara de La Tercera.
Luego, haciéndose el desentendido, pregunta si es de una marca determinada (sabiendo que no lo era) y finalmente muestra la lata a los presentes: era una gaseosa de marca Quatro y Díaz sin decir nada se mofaba del archirrival horas después de haberlos vapuleados en el coloso ñuñoíno.
Según el jugador, su acción fue envrespuesta a las bromas que le hicieron los colocolinos tras ser eliminados por Boca Juniors en la Copa Libertadores y que incluyeron un avión que sobrevoló el Nacional con la frase: “La copa grande no es para equipos chicos”.
“Las burlas fueron de todos y en el estadio nos enteramos de lo que habían hecho, por lo mismo, teníamos una espina clavada y nos dio mayor motivación par ganarles el partido”, sostuvo el dueño de la jineta de la oncena de la Casa de Bello.
Lo que Marcelo Díaz no sabía era que ese sería uno de los últimos partidos que Universidad de Chile le ganaría a Colo Colo, ya que el 5 de mayo de 2013 se apagarían las victorias académicas y comenzaría una sequía que ya lleva once años. Eso sin contar los más de veinte años que no logran un triunfo en el reducto se que encuentra en Macul.