Chile cerró su participación en la Copa Davis con un triunfo ante Eslovaquia. El equipo capitaneado por Nicolás Massú llegó eliminado a la última serie, pero con el objetivo de mejorar el ranking y así ser sembrado en las Qualifiers del próximo año. Las victorias de Christian Garin en singles y de Nicolás Jarry y Tomás Barrios en dobles permitieron finalizar el certamen con una alegría.
El viñamarino se refirió a la inclusión en el dobles del Príncipe, que continúa con complicaciones de salud. “Era una de las posibilidades. Veníamos hablando cada vez que nos tocaba una serie de cómo se iba sintiendo Nico. En este formato, el número uno juega segundo. Si Tabilo termina un partido largo, siempre tenemos que estar atento porque puede entrar. Nico estaba atento, Barrios estaba atento”, comenzó señalando Massú en conferencia de prensa.
“Terminado el partido, te dan 15 minutos para decir el equipo que va a jugar. Uno tiene que saber como está de físico, de ánimo y muchas situaciones. Pero ellos ya se conocen, entonces eso es muy bueno. Uno puede elegir con las opciones que uno trabaja”, añadió.
Massú continuó refiriéndose al apoyo que le entrega a sus pupilos, algo que también señaló Garin. “Siempre hay que recalcar el trabajo que tiene cada jugador, que tienen su equipo y sus entrenadores, y viajan con ellos el 95 por ciento del año. Ellos son los que están en el día a día. Cuando nos juntamos, los veo en el circuito o cuando conversamos, a mí me gusta estar cerca de ellos, aunque a veces no nos veamos en semanas o meses. Tengo la suerte de que los conozco hace años, entonces tenemos esa confianza de que nos podemos decir ciertas cosas de frente y yo también puedo entender. También jugué Copa Davis muchos años, fui jugador, entiendo lo que está pasando y me adapto a cada personalidad. Siempre han luchado, han dado todo. Lo vieron hoy, no estábamos clasificados para ir a Málaga, pero lo dieron todo. Es un tema de actitud”, sentenció.
Las complicaciones de Jarry
Jarry, en tanto, volvió a entregar detalles de la neuritis vestibular que afecta su equilibrio y coordinación. “El tenis es un deporte muy duro mentalmente y a este nivel hay que estar al cien. Lo que estoy sufriendo, lo que estoy pasando es algo bien especial. Es difícil de aceptarlo, donde nadie sabe mucho qué está pasando. Me afectó mucho el hecho de que me dijeron que para el US Open iba a estar bien y esto se ha alargado”, indicó.
“Fue un golpe emocional muy duro, después de todo el esfuerzo que le he estado poniendo estos tres meses. Es un proceso de aceptación difícil, donde he estado trabajando para salir y gracias a todo el equipo, a todo el esfuerzo que pusieron los jugadores, a toda la confianza del cuerpo técnico de aceptar mi situación y de darme el tiempo que necesitaba, logré salir a tener un buen estado para salir adelante. Para dejarlo todo y salió de la mejor forma porque terminamos arriba”, complementó el nieto de Jaime Fillol.
Jarry también realizó un análisis sobre la serie ante Eslovaquia. “Fue un partidazo. Es difícil. Juegan a otro tenis en Europa, en estas condiciones, están criados de otra forma. Hay que estar muy duro mentalmente, hay que aguantar. Son mucho más agresivos. Aguantamos muy bien. Lo que hizo Christian, cómo lo dio vuelta y cómo se puso a jugar. Nosotros, en el dobles, hicimos lo mismo. Jugamos con pocos errores, lo más agresivos posibles, aguantando sus buenos tiros de ellos, que por momentos pueden hacer magia. Estuvimos muy fuertes mentalmente y los aguantamos cada minuto, así que nos vamos con la cabeza bien arriba”, sentenció.