No todo pudo ser feliz en el primer triunfo de Chile en el fútbol masculino. La victoria de 1-0 del equipo de Eduardo Berizzo en Santiago 2023 tuvo una mala noticia muy cerca del final del partido.
Porque el equipo Sub 23 de la Roja tuvo un gran partido sobre los aztecas. Después de un comienzo impreciso, el equipo logró abrir la cuenta con una conquista de Maximiliano Guerrero tras una gran habilitación de Damián Pizarro.
Es más, ambos jugadores se entendieron muy bien dentro de la cancha. El delantero de Colo Colo, siempre en la posición de delantero, participó en varias jugadas precisas con el puntero de Deportes La Serena.
Incluso, en los mejores momentos de equipo, ambos jugadores conectaron de buena forma pasada la hora de juego, pero el remate del centrodelantero de los albos fue bien repelido por el meta norteamericano Fernando Tapia.
Mal presagio
Chile dominaba el partido en el segundo tiempo e, incluso, se daba el lujo de perderse más de un gol en el final del encuentro. Sin embargo, a los 86 minutos, se encendió la preocupación en el equipo chileno.
En una jugada justo en la mitad de la cancha, el único 9 nominal de la convocatoria de Berizzo, tuvo un fuerte choque con el zaguero azteca Rafael Fernández, que lo impactó en un pie y en el estómago.
Fueron segundos de preocupación, cuando los compañeros del jugador chileno miraron inmediatamente al banco de suplentes para advertir un posible cambio en el final del duelo.
La decisión no se hizo esperar. La camilla ingresó a los 89 minutos para sacar al delantero, quien salió con visibles muestras de dolor tras el golpe con el zaguero de los norteamericanos, para permitir la entrada al partido del cruzado Clemente Montes.
Y aunque el cuerpo médico del cuadro nacional no estableció los alcances de la lesión de ariete, lo cierto es que su presencia está al menos en duda para el segundo duelo del equipo, el próximo jueves ante Uruguay, solo tres días después del estreno.