El sol californiano ha cambiado las sensaciones de Christian Garin (97°). Tras un arranque de año en donde no pudo conseguir buenos resultados y quedó muy complicado en en el ranking, el chileno despegó en Indian Wells para dar con una actuación que recuerda a sus mejores tiempos en el circuito. El martes enfrentará a Alejandro Davidovich Fokina (28°) por el pase a cuartos de final.
Duelo al que llega con las mejores sensaciones posibles. A lo largo de la semana, no solo ha conseguido sorprender al mundo entero con sus victorias, incluida una ante Casper Ruud (4°), sino que también con su forma de jugar. Una que se venía viendo desde el partido ante Dominic Thiem en el Chile Open y que ahora ya parece haberse interiorizado completamente al nortino.
“Estoy muy feliz de jugar de esta manera, agresivo, yendo a la red. Esta es la forma de la que me gusta jugar y la única que tengo para poder ganarle a esta clase de jugadores. Quiero seguir mejorando y seguir disfrutando de este torneo”, confesó el “Tanque” tras su victoria 6-4 y 7-6(2) ante Ruud, la cual se transformó en la tercera oportunidad en que logra derrotar a un jugador del Top 5 del ranking ATP.
Y la frase no pierde sustento si se analizan los números que dejó el compromiso entre el chileno y el finalista de dos Grand Slam (Roland Garros y US Open) en 2022. Gago subió en 24 ocasiones a la red y consiguió ganar el punto en 19 de ellas. Además, firmó 39 tiros ganadores, de los cuales 27 fueron con su derecha. Por el contrario, los errores no forzados sumaron 32.
Si del servicio se trata, el cinco veces campeón ATP logró conectar un 58% de primeros servicios, ganando el 80% de ellos. Se anotó con cinco aces y dos dobles faltas. Además solo permitió un quiebre en cuatro chances que tuvo de ceder su juego de saque.
Pero este estilo no apareció solo en el desierto californiano. Garin ya lo había mostrado en el Chile Open, un torneo en donde quedó eliminado en segunda ronda, pero en donde comenzó a edificar el camino que hoy lo tiene entre los 16 mejores del primer Masters 1000 de la temporada. Su entrenador, Andrés Schneiter, fue quien se lo confesó a La Tercera, minutos después de que la raqueta nacional venciera a Dominic Thiem en su debut en Santiago.
“La idea era nosotros jugar agresivo y es lo que venimos trabajando, jugar lo más agresivo posible, obviamente que la táctica era ser así con Thiem porque por momentos juega a veces alto o para adelante y si te vas muy atrás podíamos entrar en una situación de la cancha que no queríamos”, expuso en aquella oportunidad en San Carlos de Apoquindo.
Otro factor determinante es la confianza, principalmente gracias a varias victorias al hilo que lleva conectadas. Durante 2023 su mejor registro hasta el momento se había dado en el Challenger de Numea, la primera semana de enero. En la capital de Nueva Caledonia, “Gago” sumó tres partidos consecutivos ganando, una marca que no lograba desde julio de 2022 cuando hizo cuartos de final de Wimbledon.
Sin ir más lejos, después del Challenger y antes de su llegada al condado de Riverside, el nortino solo había ganado dos partidos en tres meses. Uno en Córdoba ante Pedro Martínez y el otro en Santiago ante el pupilo de Nicolás Massú.
Ahora en cambio ya son cinco consecutivas. A sus dos victorias en la ronda de los clasificatorios, se suman las conseguidas ante Daniel Galán, Yoshihito Nishioka y Casper Ruud. El martes, deberá medirse ante Alejandro Davidovich Fokina para replicar su mejor resultado en un Masters 1000: los cuartos de final que consiguió en París (2019), Madrid (2021) y Roma (2022).
De momento también asegura 106 puntos que lo dejan 80 en el live ranking. Si vence al español podría hacer 180 y rozar uno de los objetivos que se puso junto a su equipo. “Tenemos nuestros objetivos bien claros, queremos sacar 200-300 puntos rápido. Seguir sumando, entrar a Roland Garros, entrar a los torneos grandes. Si logramos entrar a Roma, Madrid sería espectacular”, contó Schneiter a El Deportivo en el Chile Open.
Una semana que sin dudas también influyó en Garin, pero no solo por lo que hizo él mismo, sino también por lo realizado por Nicolás Jarry. La consagración del santiaguino en San Carlos de Apoquindo, sirvió como motivación para el resto de la comitiva nacional, al punto de que no solo “Gago” está disputando los octavos de final de Indian Wells, sino que también Alejandro Tabilo. Ambos venían en malos momentos personales, pero ahora parecen estar jugando a su mejor nivel. Las ganas de recuperar el número uno de Chile (que ambos lo han tenido en el último año) y la confianza de ver que trabajando bien, las cosas se pueden lograr, los tienen brillando bajo el sol californiano.
El martes la historia se puede seguir escribiendo. Por ahora, es la primera vez desde 2007 que hay dos tenistas chilenos en octavos de final de un mismo Masters 1000, replicando lo logrado por González y Massú en Roma 2007.