En San Petersburgo, en el estadio que recibirá la próxima final de la Champions, el Betis reanudó su sueño europeo. Y lo hizo con una alegría, con contundencia y el overol puesto. En el duelo de ida por los playoffs de la Europa League, para clasificar a los octavos de final, el equipo que dirige Manuel Pellegrini le ganó con justicia al Zenit de Rusia por 3-2.
El técnico chileno debió visitar a los rusos con bajas importantes. Además de la ausencia de Claudio Bravo, quien no juega hace casi un mes, los verdiblancos no contaban con los más talentosos: Sergio Canales y Nabil Fekir. El primero, por culpa del Covid-19, y el segundo, debido a una suspensión. Con un equipo mixto, Pellegrini intentó mantener el estilo que lo tiene encumbrado. No está de más recordar que el Betis es el único equipo español que está vivo en tres competencias (Liga, Copa del Rey y Europa League).
El primer tiempo fue de alta intensidad, con cinco goles. La eficacia del Betis fue lo más destacable del lapso inicial. Antes de los 20 minutos, el cuadro del Ingeniero estaba 2-0 arriba en el marcador. En los 8′, abrió la cuenta gracias a la pelota detenida. El argentino Guido Rodríguez puso el 1-0 con un cabezazo, tras un tiro libre del inoxidable Joaquín. Luego, en los 18′, la diferencia se aumentó a favor de los béticos gracias a Willian José, que encaró con espacio y sacó un remate por bajo. Puede sonar paradójico, pero después del 2-0 el partido se le complicó al Betis.
Ese gran inicio de partido se diluyó y el Zenit despertó. Tanto así que se demoraron tres minutos en igualar el marcador. En los 25′, un cabezazo de Artem Dzyuba descontó para el local. Y de inmediato, Malcom, el mismo que tuviese un paso fugaz y discreto por el Barcelona, estableció el 2-2. Sin tener un dominio abrumador, el equipo del chileno supo golpear en momentos precisos y tener una distancia considerable, de visita, sin embargo un par de desinteligencias alteró el plan.
Cuando terminaba el primer tiempo, el Betis reaccionó y volvió a golpear. Aprovechando una mala salida desde la defensa rival, el mexicano Andrés Guardado convierte el 3-2 para la visita. Eficacia a toda prueba para los andaluces: tres remates a portería y tres goles.
Ante la necesidad de remontar, el Zenit salió con una disposición más ofensiva, regalando espacios en el fondo. Por contraparte, los verdiblancos fueron más cautelosos. Por ejemplo, Pellegrini hizo ingresar a William Carvalho por Joaquín, para tener más control en el medio. El Betis defendía más cerca de su portería, pero dejaba huecos en las bandas. Casi le empatan en los 66′, con un potente remate de Kuzyaev que dio en el travesaño.
El segundo tiempo no fue tan abierto como el primero. Con más ímpetu que buen juego, el cuadro ruso arrinconó a los españoles en su territorio. A 10′ del epílogo, el Betis derechamente se atrincheró, cuidando el resultado. Finalmente salió airoso para quedar con la primera opción de avanzar de ronda en el certamen continental.
La vuelta se disputará el próximo jueves 24, en el estadio Benito Villamarín de Sevilla. Por disposición de la UEFA, los goles de visita ya no valen extra en las rondas eliminatorias.