Las imágenes son elocuentes. Las obras del Centro Acuático del Estadio Nacional están en marcha. Sin embargo, tres meses después del comienzo de los trabajos, estas todavía se encuentran en una fase preliminar, lo que genera inquietud sobre si efectivamente estarán terminados para el 31 de agosto, la fecha límite que puso el gobierno.

El año pasado fue el propio presidente de Panam Sports, Neven Ilic, el que se manifestó muy preocupado por la demora en el inicio de la reconstrucción de uno de los recintos más emblemáticos de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos de Santiago 2023. Incluso, llegó a expresar que si las obras no comenzaban antes de agosto del año pasado, el riesgo de no llegar a tiempo era alto. Sin embargo, esa percepción ha ido cambiando en el timonel continental.

“No es importante el avance mirando las imágenes de ahora, sino que la importancia está en seguir la carta Gantt. Por eso, cuando se dice que es un 10% no es algo que me complique. Lo digo como constructor civil”, explica al ser consultado por La Tercera.

La misma opinión tiene Israel Castro, director del IND, quien complementa: “Se debe distinguir que la evaluación de avance se realiza en virtud de la programación de la obra. El Centro Acuático se encuentra dentro de lo establecido, con más del 10% de ejecución”.

“En términos concretos, a esta fecha estamos con la ejecución de excavaciones, fundaciones, estructuras de la nave de la piscina exterior, entre otras. Por lo tanto, seguimos avanzando en nuestro compromiso de que estarán finalizados y listos para utilizarse para los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos”, agrega.

Ilic también aprovecha de poner como ejemplo el estado del Centro de Deportes Colectivos, cuya entrega está prevista para el 1 de septiembre. “Actualmente se están haciendo las fundaciones, luego viene un prefabricado, que ya está hecho con anticipación. Eso se monta y de un mes a otro el avance va a saltar al 50%”, destaca.

“El Centro de Deportes Colectivos tiene una particularidad. El avance se ejecuta en dependencias distintas al recinto, y luego se realiza un montaje de estructuras al final. En terreno se prepara el espacio para que dicho proceso sea lo más expedito y rápido posible. Por tanto, esta construcción tiene un 15% de avance, y también está dentro de lo programado”, indica Castro.

En ese sentido, el líder del IND sienta su convicción en la forma en que se están llevando a cabo las obras. “Estamos en supervisión constante de parte de los equipos técnicos del IND. Por el momento, avanzamos según lo establecido en las diferentes cartas Gantt y no se requieren de acciones adicionales. No obstante, siempre estamos observando que todo avance según lo planificado. Y si vemos que esto tiene alguna variación, podemos duplicar turnos de obras si fuese necesario, lo cual está dentro de las condiciones de los contratos”, advierte.

Otra toma del Centro Acuático del Nacional. Foto: La Tercera.

El martes pasado, el nuevo ministro del Deporte y flamante presidente de la Corporación Santiago 2023, Jaime Pizarro, realizó una visita a las dependencias del Estadio Nacional, específicamente al Centro de Deportes de Contacto. Ahí, el exfutbolista reconoció las complejidades del proceso. “Creo que el desarrollo que debemos ir cumpliendo en forma paralela con la infraestructura, con la planificación, con la operación que deba exigirnos este evento es, por cierto, el gran desafío que vamos a tener en esta etapa previa”, planteó.

El Centro Acuático, que contempla un área de 19.124 metros cuadrados y un aforo de 2.400 espectadores, fue una de las obras que más críticas tuvo, debido a que se terminarán pagando $ 18 mil millones adicionales a lo que se había presupuestado inicialmente, una inversión que fue justificada por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia, que aseguró que la variación se debió al aumento del valor de los materiales de construcción y al acotado plazo de tiempo para realizar las obras. Solamente se declaró admisible la oferta de la constructora Moller y Pérez Cotapos.

En cuanto a las complicaciones que han enfrentado, Castro detalla: “En términos de obras, ninguna. Los problemas surgieron por temas conocidos por todos, como la pandemia, la inflación y encarecimiento del mercado de la construcción. Además, recibimos algunos proyectos sin las tramitaciones administrativas necesarias para llamar a licitación, lo cual habría dado más holgura con los tiempos. Desde que asumimos nos hicimos cargo de lo necesario para sacar adelante esta tarea y lo más importante es que no tenemos licitaciones pendientes y todas las obras están en proceso de construcción y avanzando”.

El factor Orrego

Luego de la reunión de directorio extraordinaria que se celebró el jueves y donde se ungió a Pizarro al frente de la corporación, se produjeron los primeros cambios en la entidad, con la salida de la gerenta de Comunicaciones y Comunidades Joanna Lederer y el gerente legal Jaime Millar.

El principal diagnóstico interno está en la falta de ambiente para el megaevento. “Santiago no está vestido de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos”, es la mayor crítica. Uno de los más inquietos es el gobernador de la Región Metropolitana, Claudio Orrego, quien está decidido a través de la Gobernación a compensar esa debilidad en términos de publicidad. Nicole Sáez, exsubsecretaria del segundo gobierno de Michelle Bachelet, cumple un rol clave como gerenta de desarrollo humano de la Corporación Regional.

Así luce el Centro de Deportes Colectivos del Estadio Nacional. Foto: La Tercera.

Sin ir más lejos, este mismo fin de semana comenzarán estas acciones con el lanzamiento de Gana Santiago, una actividad creada para potenciar al evento y que se llevará a cabo mañana, a las 10.00, en el Parque Bicentenario de la Infancia en Recoleta, para luego trasladarse hacia el Parque Metropolitano.

Asimismo, la directora ejecutiva Gianna Cunazza, permanecerá en el cargo, a pesar de los cuestionamientos que tiene por cómo se ha manejado el rumbo de la corporación. Su continuidad responde a que desde el gobierno central se llegó a la conclusión de que no era conveniente sacarla de su puesto ahora que ya está todo en tierra derecha, pues una decisión de esta índole significaría un daño mayor.

Por otra parte, el excesivo control del Mindep sobre la corporación, que en teoría es un ente autónomo, causa bastantes tensiones desde la época de la exministra Benado, que siguen dándose en el comienzo de la era Pizarro, situación que solo contribuye a generar un pésimo ambiente y alimentar malas relaciones.

A siete meses del comienzo de los Juegos, Santiago 2023 no solo enfrenta el desafío de cumplir con los tiempos de entrega de infraestructura, sino de armonizar las relaciones entre las distintas áreas que conforman una corporación que vive días muy tensos y marcados por los cambios.

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