El excampeón de pádel que se volvió futbolista y que fue detenido por hacerse amonestar para que su círculo ganara dinero

Enrique Jesús Salas, el nombre real del futbolista Kike Salas, fue arrestado por la Policía Nacional de España por acusado de estafa. En específico, el defensa del Sevilla se hacía ganar tarjetas amarilla en los partidos para que su círculo cercano ganase dinero gracias a las apuestas deportivas.

Las sospechas nacieron al constatar que Kike Salas recibió siete tarjetas amarillas en sus últimos nueve compromisos con los andaluces. Además, se constató que estas amonestaciones ocurrieron durante los minutos finales de cada pleito, y en circunstancias bastante polémicas.

A temprana edad, Kike Salas tuvo que elegir entre el fútbol y el pádel. Y aunque se inclinó por el balompié, lo cierto es que su pasada por el deporte de la pala tuvo una historia de éxitos pues cuando tenía 9 años se proclamó campeón del mundo de pádel en categoría Benjamín.

Tiempo más tarde, logró convertirse en el mejor de España con la selección de Andalucía.

Que Kike Salas se hubiera dedicado al pádel no fue casual, ya que sus padres (Enrique y María Carmen) regentan desde hace más de 20 años el Esmac Club de pádel en Morón.

Sin embargo, a los 13 años dejó el pádel y eligió el fútbol. En este camino, transitó por las divisiones inferiores de Málaga y Betis, pero fue el Sevilla el que lo terminó incorporando a sus series cadetes.

Los investigadores creen que se realizaron alrededor de 30 apuestas en establecimientos ubicados en Morón de la Frontera, la ciudad natal de Kike Salas, en las que obtuvieron ganancias superiores a los 10 mil dólares.

Kike Salas arriesga penas que van desde los seis meses hasta los tres años de prisión.