Erling Haaland continúa preparando la próxima temporada de la Premier League junto al Manchester City. Atrás quedaron las celebraciones por el triplete conseguido por los Citizens en la temporada anterior donde consiguieron el título de la Premier League, la Copa FA y la Champions League en un cerrado partido contra el Inter de Milán.
Con este palmarés el plantel de los celestes tuvo tiempo para disfrutar sus vacaciones y un jugador que aprovechó bien este tiempo fue Erling Haaland. El goleador del City aprovechó estos días de descanso para conseguir un lujoso vehículo.
Se trata del lujoso y exclusivo modelo Ferrari Monza SP2 con el que el noruego ha logrado llamar la atención tanto de los seguidores del fútbol como los aficionados al automovilismo.
El vehículo tiene un precio de 1,9 millones de dólares con una producción limitada a tan solo 499 unidades disponibles para la venta en todo el mundo, transformando a este modelo en un símbolo de estatus y exclusividad con el que Haaland ha logrado deslumbrar fuera de las canchas.
Por sus características este vehículo es único que mezcla la elegancia de los modelos clásicos con la tecnología de vanguardia. Esto se puede apreciar en su diseño sin techo y sin parabrisas convencional, lo que trae al recuerdo el inolvidable Ferrari 166MM “Barchetta”.
Entre sus características destaca una aceleración de cero a 100 en sólo 2,9 segundos, sobrepasa con creces los 300 kilómetros por hora y monta un motor V12 de 6,5 litros con una potencia de 810 CV.
Siguiendo los pasos de Ibrahimovic
Este modelo no es nuevo dentro del mundo de los futbolistas. En octubre de 2019 el delantero sueco Zlatan Ibrahimovic había enseñado su nueva adquisición para su colección como autorregalo.
“Feliz cumpleaños para Zlatan”, publicó en su cuenta de Instagram enseñando su nuevo vehículo.
Claro que no siempre ha tenido buenos momentos conduciendo este modelo. En mayo de 2020, en plena pandemia del Covid-19, Ibrahimovic se trasladó a Suecia por algunos días antes de reincorporarse con sus compañeros.
Aprovechando que las restricciones no eran tan estrictas allí, el atacante salió a recorrer las calles de Estocolmo. Claro que había un detalle. El vehículo no estaba con el permiso de circulación al día, ya que había vencido el 30 de marzo y se exponía a recibir una multa.
La Agencia Sueca de Transporte (STA), a través del portavoz Mikael Andersson, indicó que “el permiso de circulación está cancelado desde que se dio de baja el pasado 30 de marzo. No se puede conducir un automóvil si se da de baja”, recogió en su momento The Sun.