Nacional de Paraguay salió con una actitud completamente distinta al partido de ida. Conscientes de que se encuentran abajo en el marcador global, sus delanteros, acompañados por los mediocampistas, ejercen una presión constante en la última línea de Palestino para dificultarles la salida.
Es en ese contexto, que luego de un peligroso acercamiento por parte del equipo guaraní, la presión se hizo notar. Corría recién el minuto siete del encuentro cuando el volante Joe Abrigo, en su intención de despejar la pelota en la entrada del área, pasa a llevar la pierna de un rival y el árbitro sanciona falta penal. Por la acción el chileno fue amonestado con tarjeta amarilla.
Tras los doce pasos se preparaba para patear Juan Fernando Alfaro ante un concentradísimo César Rigamonti que no le quitaba la vista a la pelota. El árbitro da la señal para que el volante se disponga a patear la pelota, elige el lado izquierdo del portero y este que con mucha confianza adivina el lado del disparo.
Si bien el rebote quedó en la boca del pórtico, el propio Alfaro dio muestras de nerviosismo y falló increíblemente tirando la pelota por sobre el travesaño cuando el portero argentino estaba prácticamente batido. Se mantiene la igualdad sin goles en el Estadio El Teniente de Rancagua (2-0 arriba en conjunto árabe en el global).
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