El italiano Marcell Lamont Jacobs toma el trono dejado por Bolt al quedarse con el oro en los 100 metros

La prueba masculina de los 100 metros tiene un nuevo ganador olímpico. El italiano Marcell Lamont Jacobs toma el trono dejado por Usain Bolt y se consagra como nuevo campeón de la especialidad.

La plata quedó en manos del estadounidense Fred Kerley, mientras que el bronce quedó en las manos del canadiense Andre de Grasse.

Los competidores llegaron a esta instancia con una sorpresa. En la segunda semifinal de la competencia se vio una de las llegadas más ajustadas en la definición del paso a la siguiente ronda. El nigeriano Enoch Adegoke y el estadounidense Trayvon Bromell, uno de los favoritos, cruzaron la meta tras Zharnel Hughes con un tiempo de 10.00. Por lo mismo, se debió recurrir a la foto de llegada que estableció que el africano fue una milésima más rápido que el norteamericano.

Ya en la final los nervios comenzaron a asomar. Los atletas fueron presentados y fueron tomando las posiciones en sus respectivos carriles. Aquí, el nerviosismo le terminó pasando la cuenta al británico Zharnel Hughes, quien fue descalificado por una salida falsa.

Tras ello, llegaba la hora de reenfocarse para los demás participantes, combatir la presión y retomar la concentración.

Durante la carrera también hubo sufrimiento. El nigeriano Adegoke se lesionó en medio de la carrera y no pudo completar la final.

Después del apretado momento en el que los deportistas cruzaron la meta llegó la incertidumbre. El italiano no quiso celebrar hasta ver el informe oficial en las pantallas del estadio olímpico. Y cuando apareció, la celebración fue total. Del cansancio propio de la prueba al éxtasis absoluto.

Jacobs rompe la racha magnífica de Usain Bolt en la prueba de velocidad. El jamaiquino comenzó su dominio en los Juegos de Beijing en 2008 obteniendo la medalla dorada, la misma que consiguió en Londres 2012 y Río 2016. Así, después de 13 años, la presea de oro de los 100 metros tiene un nuevo dueño.