Octavio Rivero tendrá una última oportunidad en Colo Colo. El delantero entró en la convocatoria para el partido de esta tarde ante Audax Italiano, rompiendo así una oscura racha de tres fechas consecutivas fuera de las citaciones. Se trataba meramente de una decisión técnica, ya que el entrenador albo, Pablo Guede, consideraba que el uruguayo no mostraba actitud en las prácticas.
El martes pasado, en el primer entrenamiento de la semana, el DT del Cacique se reunió con los referentes del primer equipo, como es habitual. Eso sí, esta vez les planteó la idea de darle una última chance al charrúa, que luego de su frustrado traspaso a Belgrano, situación que lo enfrentó públicamente con Blanco y Negro, había bajado notoriamente su rendimiento.
La respuesta del grupo liderado por Esteban Paredes, su gran aliado en el camarín, fue positiva. Colo Colo, después de un inicio complicado, alcanzó la cima del Torneo de Transición, por lo que hubo consenso en hacer "borrón y cuenta nueva".
Rivero, quien sufrió los reproches del Tanque debido a su conducta, previo al duelo con San Luis, según apuntan en Pedreros, no tiene asegurado vestirse hoy en el Bicentenario La Florida, pero al menos volverá a concentrar con el equipo.
Eso sí, no fue gratis. El atacante hizo un mea culpa. "El jugador reconoció que había estado mal y no que no se había comportado de buena forma. Además, se juramentó a entregarse por entero para luchar por el título y por el bien de Colo Colo", aseguran en el Cacique.
El que salió de la citación es Jaime Valdés, quien ayer, en la última práctica, no pudo superar sus molestias. Su baja se suma a la del suspendido Jorge Valdivia.