Italia es pura desazón. La Azzurra quedó fuera de la carrera por clasificar al Mundial de Qatar, luego de caer con Macedonia del Norte por la cuenta mínima en la agonía, con un gol de Aleksandar Trajkovski que, además, le dio al Lince Rojo la posibilidad de enfrentar a Portugal en el repechaje, por un cupo en la cita planetaria.

La cara contraria a la alegría de los ganadores del partido fue la de evidente tristeza que mostró el equipo de Roberto Mancini, quien se llenó de lamentos tras el compromiso. “Esta noche sucedió algo increíble, no hay palabras para describirlo. Algunos partidos son así. A partir de la Eurocopa, la fortuna se convirtió en mala suerte en todo momento”, declaró el DT.

El estratega calificó el hecho de no haber clasificado al Mundial como el peor episodio de su trayectoria. “La Eurocopa que ganamos fue la alegría más grande de mi carrera profesional, del mismo modo que esta eliminación es mi mayor desilusión”, expresó.

Mancini, además, evitó dar pistas sobre si seguirá o no al mando de la selección italiana: “La decepción es demasiado grande ahora para hablar de futuro. Ya veremos. A nivel humano puedo decir que quiero más a los chicos que en julio. Veremos, es difícil decir qué va a pasar. Hay que dejar tiempo porque la desilusión es enorme. Estoy seguro de que este equipo tiene un gran futuro. Estoy apoyando a estos jugadores ahora más que nunca”.

Pese a la decisión del entrenador de no referirse a su continuidad, el presidente de la Federación Italiana de Fútbol, Gabriele Gravina, no escondió su deseo de que el otrora adiestrador del Manchester City se mantenga en la banca de la Azurra.

“La derrota de esta noche nos hace entender que hay que cambiar algo en nuestro fútbol. No me refiero solo a reformas. Empezamos a pensar si hay que utilizar más a los jóvenes... Eso es nuestra responsabilidad. ¿Mancini? Espero que siga”, cerró el timonel.