El libertador de River

La rica historia de River Plate presenta una nutrida lista de ídolos. Amadeo Carrizo, Ángel Labruna, Ramón Díaz y Enzo Francescoli son algunos de esos referentes. No obstante, hay uno que no puede faltar: Marcelo Gallardo (43). En su época de jugador se ganó el cariño de los hinchas por su talento, pero su estatus se acrecentó en su labor de entrenador.

En un lustro como DT, ya es el estratega más ganador del club, con 10 coronas. Cada vez que juega River, los fanáticos le cantan a Gallardo, en un idilio forjado dentro de una ruta más que exitosa. El popular Muñeco se transformó en Napoleón.

En mayo de 2014, Gallardo asume la dirección técnica de River. Fue casi dos años después del retorno a Primera. Uno de los grandes registros que tiene a su haber es que el elenco de Núñez ha llegado a 15 finales en cinco años, contando la Libertadores y la Copa Argentina 2019. De las 13 disputadas hasta la fecha, ganó 10: una Copa Sudamericana (2014), tres Recopa Sudamericana (2015, 2016 y 2019), dos Libertadores (2015 y 2018), una Suruga Bank (2015), dos Copa Argentina (2016 y 2017) y una Supercopa Argentina (2018).

Quienes conocen al estratega lo definen como meticuloso y detallista. Pasa gran parte del día en el club, no solo en el trabajo del plantel de honor, sino que también observa a las inferiores. Además, tampoco tiene problemas en dejar en la banca a jugadores estelares si la ocasión lo amerita. Un ejemplo latente es Lucas Pratto, clave en la consecución de la Libertadores 2018, que hoy es alternativa de Matías Suárez y Rafael Santos Borré.

Gallardo ha impulsado grandes cambios en la forma de trabajar dentro de la institución. Su cuerpo técnico tiene a 20 personas y la única mujer es clave dentro de la metodología de trabajo. Se trata de Sandra Rossi, especialista en neurociencia, quien trabaja con el Muñeco desde el inicio del ciclo. Considerada como "la mamá" del plantel, influye en el entrenamiento del cerebro para trabajar diversas acciones: acortar tiempos de reacción, aumento de la visión periférica, mantener altos niveles de concentración, manejo del estrés, entre otras.

Pese a que la figura de Gallardo genera interés en otros clubes, tiene contrato con River hasta diciembre de 2021. Tiene muchos logros, pero a la vez cuenta con una deuda: ganar el torneo argentino.