El Manchester City consiguió la épica. En el último minuto del encuentro, logró empatarle al Arsenal y le arrebató el liderato de la Premier League tras un entretenido 2-2. De esta forma, continúan en la cima del certamen inglés y mantienen un extenso invicto en Etihad con los londinenses, que no logran imponerse en dicho recinto desde 2015.
El encuentro era crucial, pues se enfrentaban dos de los elencos con más credenciales para quedarse con un campeonato que en los últimos años se ha definido por detalles. Mientras que los dirigidos de Pep Guardiola buscaban continuar con su arranque perfecto y seguir en la cima, los de Mikel Arteta pretendían batir al gran favorito y encumbrarse en la cima. Tras cuatro jornadas, los Citizens llegaron con doce unidades, mientras que los Gunners lo hicieron con diez.
Y tal como se esperaba, el cotejo inició con todo. Erling Haaland rompió el cero en el minuto 9. Savinho recibió en la mitad de la cancha y enganchó hacia dentro con el control. Habilitó de gran manera al noruego, que marcó con un punterazo. Fue una definición propia de Romario por parte del escandinavo, que ya acumula diez goles en el curso actual de la Premier. Promedia dos dianas por encuentro. Además, fue su gol número 100 en 105 partidos. Sin dudas, números bestiales.
El brasileño se vio muy participativo, activo complicando a la defensa londinense. De hecho, provocó una falta en el borde del área que Gundogan incrustó en el palo tras un impecable ejecución por fuera de la barrera. Era otro golazo.
La remontada del Arsenal
El City se vio compacto, reduciendo los espacios y empujando al Arsenal sobre su arco. Sin embargo, todo cambió desde el minuto 20 luego de una complicada lesión de Rodri en su rodilla, en una acción que desató la preocupación. El más regular de los Citizens debió abandonar el terreno por Kovacic.
Dos minutos después vino el empate. Ricardo Calafiori, desde el borde del área, sacó un remate de borde interno que se fue abriendo e ingresó por el costado de la red. Una anotación de gran factura para el zurdo. El tanto del defensor volvió a meter a los visitantes en el encuentro, que se comenzó a igualar. Algo tuvo que ver la salida del estandarte del equipo de Guardiola.
Con el tiempo cumplido, vino la remontada. Gabriel Magalhaes se hizo fuerte en altura. Tras un gran tiro de esquina de Saka, el defensor se desprendió de la marca de Walker y arremetió por el segundo palo, poniendo en ventaja a su escuadra justo antes del descanso. No obstante, antes del pitazo, Leandro Trossard fue expulsado. Oliver le mostró la segunda amarilla tras un topetazo a Bernardo Silva y posteriormente lanzar lejos el balón, evitando que se juegue rápido. Una cartulina bastante severa pero ajustada al reglamento, que desató la indignación en la vereda Gunner.
La superioridad numérica, lógicamente, fue preponderante. Marcó el trámite de un complemento dominado por el City ante un Arsenal replegado, que buscó salir mediante transiciones rápidas. Los locales no tardaron en meter a los londinenses en su área. Sin embargo, el descuento no llegaba. Los Gunners, con un hombre menos, parecían lograr resistir los embates de un conjunto que no logró crearse ocasiones manifiestas de gol.
No obstante, en la última jugada vino el empate. En el octavo minuto de descuento, vino un agónico gol. John Stones, que no había tocado la pelota desde su ingreso, capturó un rebote en el área chica y desató la algarabía en Etihad. El City mantiene el invicto en su casa contra el Arsenal, que no logra ganar desde 2015. Es decir, nueve años. Aunque, en rigor, la cifra se extenderá por lo menos un año más, por lo que alcanzará la década. Así, los de Guardiola escalaron a las 13 unidades. Los londinenses, en tanto, se quedaron con 11 puntos, en la cuarta posición, una por debajo de Liverpool y Aston Villa.