El Marsella de Alexis Sánchez obtiene una agónica victoria en el clásico con el Lyon y escala al segundo lugar de la Ligue 1

El Marsella obtuvo un triunfo crucial en la agonía del clásico ante el Lyon. En el último minuto, un autogol de los locales provocó los festejos de los focenses, que contaron con Alexis Sánchez durante todo el cotejo. El conjunto portuario escaló a la segunda ubicación del campeonato galo, con 67 puntos, a ocho del PSG.

El inicio del encuentro estuvo accidentado, lo que provocó constantes interrupciones. Esto se tradujo en un pálido arranque, que careció de dinamismo y juego. En ese sentido, el deslucido trámite se prolongó, pues ambos equipos no quisieron arriesgar. Es más, propusieron un principio de análisis, de estudio entre sí. En el mediocampo se disputaron la mayoría de las acciones. Los locales asumieron un poco más de responsabilidad y, más desde lo actitudinal que lo futbolístico, poco a poco fueron empujando sobre el arco de los focenses.

Al Niño Maravilla le costó entrar en contacto con el balón. De hecho, se vio errático en algunas de sus primeras intervenciones. No obstante, al igual que su escuadra, fue de menos a más y elevó su nivel. Ahí empezó a demostrar su excelsa categoría con toques propios a su técnica. Gracias a sus apoyos y repliegues para buscar el balón, con el pasar de los minutos se transformó en uno de los mejores en su escuadra.

En el 28′ llegó la ocasión más clara. Nicolás Tagliafico arremetió por la banda izquierda habilitó a Alexandre Lacazette. El artillero se esforzó para aparecer por el segundo palo y conectar el envío. Sin embargo, mandó el balón sobre el travesaño y desperdició una inmejorable oportunidad. Les costaría caro a los leones, pero sería un aviso del goleador.

A falta de un minuto para cumplir el tiempo reglamentario, Alexis sería protagonista en la apertura de la cuenta. El atacante realizó un gran desmarque de ruptura y recibió una habilitación de Jonathan Clauss. Quedó mano a mano y remató al segundo palo con el borde interno, pero el meta Anthony Lopes ganó el duelo. No obstante, Cengiz Ünder capturó el rebote y marcó con el arco a su disposición. Así, el conjunto portuario se fue en ventaja al descanso.

La anotación anticipaba un golpe en lo anímico, pero la interrogante era para quién. Podía ser un aliciente tanto para el Lyon como para el Marsella. Y claro que lo fue. Ambos salieron con otra disposición y el partido tomó una intensidad mayor. Mientras los locales fueron a por el empate, los visitantes intentaron sentenciar el cotejo. Por momentos se tornó en un ida y vuelta constante.

Los focenses estuvieron más cerca de anotar. De hecho, Ünder desaprovechó dos oportunidades claras para desequilibrar la balanza. Primero, erró la entrega en una contra donde tenían mayoría numérica. Después, falló, con gran mérito de Lopes, un remate desde el punto penal.

En el mejor momento del Marsella llegó el descuento del Lyon a través de su emblema, capitán y goleador: Lacazette (68′). Corentin Tolisso sacó un centro peligroso al área pequeña. El ariete ganó la posición y extremó recursos para conectar el envío. Así, el excompañero de Alexis en el Arsenal sumó su vigésimo tanto en el certamen.

Tres minutos después, Sánchez tuvo la anotación en sus pies. El nacional se hizo con el balón luego de que quedara boteando en el área luego de un bloqueo de la zaga. Sin embargo, el control le quedó largo y le dio tiempo a Lopes para cortar la jugada.

En el 76′ hubo una ocasión inmejorable. El chileno recibió cargado por la derecha y encaró. Levantó la cabeza y dejó mano a mano a Clauss. El lateral definió de primera, pero el arquero se vistió de figura al realizar una increíble estirada. Con una gran intervención, envió el remate al travesaño. En el cierre, Pau López sumó créditos para ser el más destacado luego de contener un remate a quema ropa de Malo Gusto.

Este último fue el villano de su elenco. En una acción completamente desafortunada, el galo de 19 años se marcó en propia puerta luego de tres rebotes en el área de los locales. Anotación y pitazo final, para la alegría de unos y el llanto de otros. De esta forma, los marselleses obtuvieron un agónico triunfo, que los deja en el segundo lugar de la Ligue 1, obteniendo el último cupo de clasificación directa a la fase grupal de la Champions League.