Argentina y Brasil vivieron un partido histórico en Río de Janeiro. Hubo represión policial en las gradas, suspensión momentánea y victoria del visitante, quien le quitó el invicto de local en Eliminatorias al Scratch. Entre medio de todo eso también apareció Messi, quien además de mandar a su equipo a los vestuarios en medio de los enfrentamientos, tampoco dudó en enfrentarse con sus rivales.

Esto último fue uno de los momentos tan tensos de la noche del 10. Cuando Argentina recién había reingresado al campo, tras irse a camarines hasta que se detuvieran las agresiones a los hinchas, el jugador del Inter Miami fue a increpar a Rodrygo, quien ya conversaba con Rodrigo De Paul. Ahí es que Messi incluso agarra por atrás del cuello al delantero del Real Madrid. Hubo miradas y frases.

En Argentina aseguran que el ex Barcelona le dijo “Si somos campeones del mundo, por qué somos cagones”, aunque las cámaras televisivas no logran evidenciar 100% el dialogo. La reacción del ocho veces ganador del Balón de Oro era de visible molestia y tras unos segundos de dialogo se alejó de Rodrygo, quien se quedó conversando con De Paul.

Argentina se llevó los puntos

El equipo de Lionel Scaloni recuperó la senda de la victoria en Eliminatorias y dejó atrás la derrota con Uruguay en La Bombonera. Los tres puntos que consiguieron en el Maracaná elevan a un equipo que ya suma 15 puntos de 18 posibles. Son líderes de la clasificación, dos unidades arriba que los dirigidos por Marcelo Bielsa.

Un encuentro que tuvo mucho roce y bronca. Los ánimos estaban agitados desde el problema en las tribunas y aquello terminó viéndose reflejado en la cancha. De hecho, cuando Otamendi anotó el 0-1 los albicelestes lo celebraron a muerte. Brasil intentó cambiar la realidad, pero se quedó con una derrota que cierra una fecha clasificatoria de pesadilla. Primero perdieron ante Colombia y ahora de locales ante su mayor rival.

Messi fue el encargado de hablar post partido y entregó un análisis de lo vivido en Río. “Era un encuentro muy duro con todo lo que había en juego. Veníamos de perder, ellos arrastraban resultados no favorables con la gente muy insatisfecha. Fue un partido parecido a la final de la Copa América, muy trabado, ellos nos presionaban un poco más, más arriba. Nos costaba hacer posesiones largas, pero estos partidos se definen por detalles y por suerte tuvimos el cabezazo de Otamendi”, comentó.