El multifacético Jaime Pizarro: el Kaiser llega al alero de Luksic

Jaime Pizarro
Jaime Pizarro en un estadio de Independencia. (Foto: Felipe Pizarro C)

El capitán de Colo Colo 91 suma un nuevo rol a su extenso y variado currículo. Desde la fundación que sustenta la familia del presidente del grupo Quiñenco, se aboca al rol social. El hockey es el nuevo deporte que impulsa desde la organización.



Jaime Pizarro está entusiasmado. El primer capitán de un equipo chileno que levanta la Copa Libertadores, con Colo Colo 91, tiene varias razones para estarlo. Hace pocas horas estuvo celebrando el triunfo del equipo de Gustavo Quinteros sobre Alianza Lima.

Como todos los hinchas albos, se ilusiona. “En cualquier grupo y ante cualquier rival, tener seis puntos después de dos partidos es muy bueno. Si a eso uno le suma que ganó en Brasil, que ganó de visita, que como local ha logrado un nuevo triunfo, que está con River con seis puntos y que ha tenido expresión deportiva muy positiva, sólida, es un resumen bastante interesante y auspicioso para lo que viene, entendiendo que es un torneo duro, complejo y largo”, sostiene. En el duelo frente a los Íntimos estuvo Vicente, su retoño en el campo de juego y, quizás retrotraerse a sus exitosos tiempos de futbolista.

Sin embargo, lo que tiene más entusiasmado al Kaiser es su nueva función profesional, que enriquece un currículo que, además de su trayectoria como jugador, sabe de variadas funciones. Además de titularse como profesor de Educación Física, ha sido director técnico, gerente deportivo, miembro del directorio de Blanco y Negro y encabezó Chiledeportes. Ahora es el director de Deportes de la Fundación Luksic. “La fundación, a partir de enero, ha iniciado el funcionamiento de la nueva área de deportes. Hay un desarrollo respecto de poder impulsar e ir consolidando los proyectos que estaban en camino, particularmente las escuelas deportivas, además la gestión de iniciativas que son postuladas a la fundación desde distintos ámbitos. Resulta bien interesante ir realizando esta gestión y potenciarla a futuro. Desde lo recreativo hasta el alto rendimiento. Es bien interesante porque obliga a relaciones con municipios, a un despliegue territorial”, explica.

La versatilidad que ha mostrado Pizarro dentro de la cancha y fuera de ella le ha servido para explorar nuevos deportes. Este semestre, por ejemplo, comenzaron a funcionar las escuelas de hockey gratuitas, el nuevo plan de la entidad, que también mantiene Reyes de Barrio, el proyecto que iniciaron conjuntamente con la Fundación Arturo Vidal. De ese plan se benefician 857 menores de 13 comunas. Con el hockey se han establecido en tres: Independencia, Lo Prado y Peñalolén. Niñas de entre 11 y 14 años reciben todo lo que requieren para desarrollar la actividad. “Nuestro inicio con las escuelas deportivas, tanto en las escuelas de hockey como en Reyes de Barrio apunta a crear competencias socioemocionales, porque entendemos que no solo se trata de movernos físicamente, sino, además, de tener algunos apoyos adicionales”, destaca.

Ilusión popular

Pizarro asume que su nombre está indisolublemente vinculado a Colo Colo. Fue esa la razón que, por ejemplo, lo llevó a desvincularse de las duras negociaciones para la renovación del contrato entre su hijo, Vicente y Blanco y Negro. Hoy, mira con calma la proyección de su retoño. “Como en todas las cosas, uno tiene que hacer las rutas. Y hay momentos en que el camino es más expedito y otros los que tiene que esperar. Ha tenido un desarrollo deportivo súper interesante y si uno lo mira, ha acumulado todas las experiencias. Ese es el camino y debe seguir transitándolo. Es lo que siempre ha querido”, evalúa.

El comienzo copero del equipo de Gustavo Quinteros lo lleva, necesariamente, a retroceder hasta el momento que lo inscribió en la historia del fútbol chileno. “Tal vez puede haber algunas cosas que pueden parecer similares. Este Colo Colo es un equipo muy generoso, muy dispuesto. Y eso siempre va a ayudar. Hay algunos parecidos”, admite.

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