En el fútbol mexicano buscan dejar atrás la tragedia vivida hace una semana en el estadio Corregidora. Aquel recinto fue el escenario de uno de los momentos más trágicos en la historia de la disciplina a nivel mundial. Los hinchas del Querétaro golpearon a los fanáticos del Atlas, en una situación que terminó con varios lesionados y sanciones para el cuadro local. Una fuerte imagen que dio la vuelta al mundo.
Los gestos para llamar a la paz se tomaron el regreso del balompié en el país azteca. Luego de que se conocieran las sanciones para los albiazules, los Gallos Blancos debieron visitar al Necaxa de Ángelo Araos, quien fue titular en un partido en el que ambas escuadras se unieron por el mismo motivo: hacer un llamado para que lo sucedido nunca más vuelva a ocurrir.
El primero de los actos llegó en la previa del compromiso. Tanto el capitán del cuadro local como el del forastero realizaron un discurso, para que luego los futbolistas titulares de cada equipo posaran junto a un cartel dirigido a los fanáticos, con el escrito “unidos somos más fuertes”.
Luego, durante el compromiso, las cámaras televisivas captaron que la botella del arquero del equipo visitante, Washington Aguerre, tenía escrito mensajes como “en Querétaro, los buenos somos más”, “en Querétaro amamos a México” y “no a la violencia”.
El último de los gestos ocurrió en los 62′. Los futbolistas detuvieron el juego para dirigirse al centro del campo y formar un círculo, en señal de unidad. Cabe mencionar que fue justo en ese minuto en el que el cotejo entre el Querétaro y el Atlas tuvo que detenerse por los hechos de violencia.
El compromiso finalizó con victoria 1-0 para el Necaxa de Araos, pero todas las miradas se fueron con los emotivos momentos con los que el fútbol intenta evitar que se vuelva a repetir una tragedia como la vivida en el Corregidora.